Dos peregrinas japonesas, Kimiko Uchii y Tamano Hayashi, han adoptado a Michi, el perro abandonado que las acompañó durante su Camino de Santiago. La historia comenzó en mayo, cuando estaban realizando el peregrinaje y un perro las acompañó hasta completar la etapa.

"Conocimos a Michi en Santiago de Compostela hace tiempo y ahora hemos vuelto a por él para que tenga un hogar", cuenta una de las peregrinas niponas. El perro las acompañó hasta completar su etapa y ellas escucharon la llamada que el Camino de Santiago les había hecho. "El reencuentro ha sido emocionante. Bueno, casi casi que lágrimas, risas, saltos de alegría...", explica la portavoz de la Asociación Protectora de Animais do Camiño, APACA.

Después, llamaron a Protección Civil y al llegar a Santiago de Compostela supieron que seguía sin un hogar, así que decidieron emprender un camino más largo para adoptarle. Siete meses después, la carta a Papá Noel ha traído un regalo navideño para ambas partes: Michi no peregrinará más porque el Año Nuevo le trae una vida nueva en Japón.