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Tráfico detecta a más de 1.800 conductores de riesgo por tasas de alcohol elevadas

Las autopsias revelan el consumo del alcohol o drogas en el 40% de los muertos en la red viaria

Jornada de seguridad vial, ayer, en A Coruña. // Miguel Miramontes / Roller Agencia

Tráfico se propone sacar de la carretera a los conductores de riesgo. En el caso del alcohol, casi 2.000 en la comunidad gallega. Una de las reformas pendientes de esta legislatura es la revisión del carné por puntos con una mayor penalización para las conductas con más accidentalidad y que con el actual catálogo de sanciones no se han logrado erradicar. El consumo del alcohol al volante es una de las lacras de la siniestralidad viaria y el delito de tráfico con mayor número de encausados. Desde la DGT se proponen retirar el carné a los multirreincidentes por alcohol -al menos dos multas por ponerse al volante con una copa de más- y solo podrán recuperarlo una vez que los médicos evalúen su estado de salud y avalen que ha superado la dependencia y, por tanto, puede volver a conducir.

Pese a las continuas campañas de Tráfico y el refuerzo de la vigilancia en carretera, son todavía muchos los que conducen pese a haber bebido una copa, un par de cervezas o unos vinos. Y con tasas consideradas delitos y que, por tanto, acarrean pena de prisión, el número de conductores interceptados en las carreteras gallegas es elevado. Solo el año pasado, las patrullas de la Guardia Civil de Tráfico en Galicia detectaron a un total de 1.843 automovilistas con una tasa de alcohol de alcohol en sangre superior a 1,2 gramos por litro, un delito que el Código Penal castiga con pena de prisión de tres a seis meses o multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, y, en cualquier caso, la retirada del permiso entre uno y cuatro años. Por negarse a realizar la prueba de alcoholemia, las patrullas de la Guardia Civil en Galicia enviaron a juicio a 78 automovilistas el año pasado. Y vía administrativa, las denuncias en 2018 en la comunidad por circular tras haber consumido alcohol rondaron las 9.500 -una media de 25 cada día-.

En total, los expedientes sancionadores abiertos el año pasado por la Agrupación de la Guardia Civil de Tráfico en Galicia superaron los 191.000 -más de 20 cada hora-. El 60% son por pisar más de la cuenta el acelerador (más de 114.000). Por consumo de alcohol interpusieron 9.485 y por drogas, 6.250.

Estos dos elementos, bien por separado o combinados, están presenten en cuatro de cada diez accidentes mortales ocurridos en las carreteras gallega, un porcentaje que duplica la presencia de alcohol y/o drogas hace cinco años, cuando el Instituto de Medicina Legal de Galicia inició una colaboración con la Guardia Civil y las Policías Locales con competencia en investigación de accidentes de tráfico para conocer las circunstancias de las muertes en siniestros viarios.

En los últimos años los forenses del Imelga, organismo dependiente de la Consellería de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, advirtió de las "altas" tasas de alcohol detectadas entre las víctimas a las que se les practicó la autopsia. En el 80% de los casos analizados llegaron a superar la tasa penal. Algunos incluso quintuplicaron y sextuplicaron el límite legal.

Durante los últimos años, las autoridades de Tráfico han manifestado su cada vez mayor preocupación por la conducción bajos los efectos del alcohol o las drogas en la comunidad. De hecho, Galicia es la segunda autonomía con más conductores sorprendidos ebrios al volante y la tercera con más narcotest que arrojan un resultado positivo.

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