- ¿Cuál es el perfil de delincuente viario que más preocupa?

-El más preocupante es el del individuo que desprecia las normas de manera compulsiva -y digo individuo porque todos son hombres- y que a pesar de las condenas que va acumulando no cambia en su actitud. Es evidente que la mayoría de las condenas que se impone a los delincuentes viarios, como son las multas, los trabajos en beneficio de la comunidad y la privación del permiso, no son suficientes para este perfil infractor y por ello estamos acudiendo a las penas privativas de libertad y a los comisos del vehículo. Pero la verdad es que todavía existe un cierto reparo a castigar los delitos contra la seguridad vial con privaciones de libertad, salvo aquellos que son extremadamente graves.

- Las alcoholemias son junto con la conducción sin permiso el delito que lleva a más conductores al banquillo. ¿Por qué no ha logrado frenar estos comportamientos?

-Estos dos tipos de delitos juntos representan casi el 98% de condenas. Sin duda en el caso de la alcoholemia y de las drogas sigue existiendo una tolerancia social, Y en la mayoría de los que conducen reiteradamente sin permiso se aprecia un déficit muy llamativo de educación, no solo vial sino general como ciudadano. La receta está en la educación, en más controles y vigilancia y una mejor adecuación de las condenas a los hechos.

- ¿Cuál es la pena más efectiva?

-A la mayoría de los condenados les produce un efecto positivo los trabajos o las multas y no vuelven a delinquir. Pero hay un 2% o 3% a los que esas medidas que ya se les aplicaron no han servido y hay que acudir a las privaciones de libertad. Necesitan un tratamiento personalizado. De ahí la importancia de los estudios criminológicos para adecuar la pena al perfil.

- ¿Cuáles son las medidas prioritarias de Tráfico?

-Solo un endurecimiento no es suficiente. La limitación de las velocidades, los controles policiales, la lucha contra las aplicaciones que avisan de los mismos, la regulación de las conductas colaboradoras con el delincuente vial como las cooperaciones o las complicidades, aumentar las posibilidades del comiso del vehículo del infractor renuente al cumplimiento...

- Desde que se reformó el Código Penal en 2007 en materia de seguridad vial, ¿cuántas penas de prisión se dictaron en Galicia?

-No disponemos de datos de las penas de prisión de los últimos 12 años y, por otra parte, del número de internos en establecimientos penitenciarios tampoco se puede deducir porque hay muchos supuestos en los que la pena de prisión no supone un ingreso en establecimiento, ya que se podrían suspender con el establecimiento de ciertas garantías o el cumplimiento de alguna condición. Desde la reforma el número de ingresados en los establecimientos penitenciarios de Galicia cumplimiendo condena por delitos de tráfico está habitualmente en los cien reclusos.

- ¿La sociedad sigue siendo tolerante con los delitos de tráfico?

-Sigue vigente la concepción de que los delitos de tráfico son delitos de gente honrada. Se dice que como cualquiera de nosotros podemos cometerlos porque nos podemos ver envueltos en una imprudencia sin quererlo, el castigo no debe de ser grave. Esto no es verdad porque la mayoría de los delitos de tráfico son delitos dolosos, no imprudentes. Se causan conscientemente y no por un descuido.

En los últimos años Fiscalía y Guardia Civil pusieron en el punto de mira a decenas de psicoténicos por falta de rigor en sus pruebas. ¿Se han mejorado los controles?

-Muchísimo. Las investigaciones que realizaron los subsectores de la Guardia Civil Tráfico de Galicia han sido determinantes en el hecho de que este tipo de comportamientos haya descendido. Hay que tener en cuenta que esta labor de vigilancia no se ha acabado y continúa de una manera permanente. Sin ir más lejos la Guardia Civil de Galicia el año pasado denunció a 394 conductores que aparentaban no tener las condiciones para una conducción segura y fueron remitidos a los reconocimientos médicos. Esta cifra representa el 42% del total del Estado

- ¿Se debería implantar un examen obligatorio para actualizar conocimientos al renovar el permiso?

-Tanto como un examen creo que sería excesivo. Pero lo que sí me ha preocupado siempre es la falta de reciclaje de los conductores más veteranos y tal vez en este apartado sí que se podría adoptar alguna medida.