La irrupción de las apuestas deportivas revolucionó el negocio del juego en Galicia. El sector tradicional, centrado en las máquinas B o tragaperras y los salones de juego y organizado en la asociación AGEO, aborda mañana en su VI congreso la situación actual, marcada por una futura Lei do Xogo que amenaza con "estrangular" a este subsector, que pide ser diferenciado del de las apuestas. Serafín Portas preside AGEO desde hace tres lustros.
-AGEO avanzará mañana un estudio sobre el juego en Galicia. ¿Puede adelantar su contenido?
-Se va a hacer un avance y nos ha llegado un resumen ejecutivo del profesor Ignacio Cases. Nos han adelantado que estamos en los índices de juego problemático más bajos de España y Europa.
- Existe una incipiente protesta social contra el sector del juego o más concretamente las apuestas. ¿Qué le parece?
-Se está utilizando políticamente al juego. ¿Puede haber problemas? Pues afrontémoslo, pero es importante separar las máquinas B [tragaperras] de las apuestas o de un local de juegos. Es verdad que las apuestas deportivas han dado visibilidad al sector del juego? Posiblemente sí. Pero nosotros como AGEO llevamos tiempo pidiendo que se regulen asuntos como la publicidad, algo en lo que la Xunta no tiene capacidad efectiva. Dependería realmente del Estado. Habría que preguntar a quien corresponda por qué lleva un decreto que iban a sacar dos años metido en un cajón. Nosotros no podemos hacer publicidad. Luego se ha visto que en la operación Arcade que el índice de incidencia [de menores] es mínimo en locales específicos de juego. También me gustaría hablar de si el juego público tiene algo que ver, que además sí puede hacer publicidad.
- ¿Se siente el sector tradicional - tragaperras y salones de juego - perjudicado frente al de las apuestas? Le pongo ejemplos: la fiscalidad y la publicidad. La nueva ley del juego de Galicia no impedirá, por ejemplo, que un jugador de élite patrocine webs de casinos.
-Es que al final eso no depende de la Xunta. El sector del juego presencial aportó casi 60 millones en impuestos a la Xunta. ¿Hay un problema? Pues pongamos medios para minimizarlo. Nosotros creamos riqueza y empleos y con una fiscalidad que nada tiene que ver con las apuestas deportivas o las ".es".
- ¿Tienen estas dos más facilidades que el sector tradicional?
-Tiene más facilidades. Y doy datos, por ejemplo, para responder a lo que se dice de que hay una expansión desmesurada del sector. En Galicia hay un ratio de un salón cada 17.000 habitantes mayores de edad. Hay comunidades en ratios de 3.000-4.000. ¿Han crecido los salones? Es que hay un cambio en el tipo de locales de hostelería. Ahora montan menos bares de siempre y más del estilo gastro-bar, donde no pinta nada una máquina B. Antonio Rial-Boubeta, profesor de la USC, ha dicho que esta no tiene ninguna incidencia en hostelería porque no atrae a los menores, juega gente de cuarenta y pico años en adelante... En 1990 había 20.000 máquinas en Galicia y ahora están activas 9.500 de las que 8.300-8.400 están en hostelería. Intentas meterlas en los salones.
- ¿Qué le parece la comparación de algunas asociaciones de ayuda a los ludópatas de que el juego es "la heroína del siglo XXI", en alusión a la ola de drogadicción de los años 80?
-No puedo admitirlo. Nosotros defendemos el juego, por ejemplo, en hostelería, que es el de un euro que tiene 500 de premio. Es ocio y entretenimiento. En un Rasca de la ONCE es un euro para un millón. Si lo mío es la heroína del siglo XXI, ¿lo otro qué es?
- Hablaba de Boubeta. Sus estudios sobre encuestas a menores de edad revelan que miles de ellos confiesan haber apostado.
-¿En apuestas deportivas?
- Sí.
-Si la máquina tipo B no es el problema, que quede claro. ¿Lo son las apuestas? Yo tengo que decir que desde AGEO no las pedimos en su momento ni tampoco podemos ser responsables de dicha situación. En su momento, cuando se habló de ampliar las terminales de apuestas en locales de hostelería [de 2.000 a 3.000], AGEO se opuso. El problema es que nos han metido en un saco que está arrastrando a un sector tradicional que llevamos muchísimos años trabajando sin generar problemas.
- ¿Entiende que es consecuencia de ese arrastre que se vaya a obligar a activar las tragaperras, al igual que las máquinas de apuestas, con un mando a distancia?
-Si la administración entiende que es necesaria una medida así para una máquina, que sea para la de apuestas. La máquina B no es atractiva para los jóvenes, así que no tiene explicación. Por esa regla de tres podríamos hablar de un tema del alcohol, por ejemplo.
- ¿Cree que se producirá esa modificación del borrador de la Lei do Xogo, cuya negociación fue bastante tensa?
Queremos una ley que nos ayude a seguir operando muchos años. Si van a sacar una que nos perjudique, pedimos que se ponderen las peticiones sectoriales que no son por capricho.
- ¿El borrador actual de esa futura ley los perjudica
-Espero que recoja cambios porque nos perjudica más que nos beneficia. Hicimos concesiones en lo de las distancias, que ya las había, control de acceso a locales de juego cuando se ha demostrado con a operación Arcade que la incidencia es mínima. Somos un sector súper regulado y casi sin sanciones, pero no queremos una ley que nos estrangule.
