Ni sueldo, ni dietas, ni pluses. Once alcaldes y 193 concejales realizaron sus tareas sin cobrar de sus respectivos ayuntamientos, lo que contribuyó a no engordar los casi 23,3 millones que estas entidades locales destinaron el año pasado a pagar a sus cargos electos. A esa cifra se unen los 3,2 millones de los políticos de las diputaciones -278.000 euros a los cuatro presidentes-, por lo que la factura total rozó los 26,5 millones, aunque a ella habría que añadir el desembolso de 42 municipios (entre ellos Ourense) que no han remitido sus datos al Ministerio de Hacienda.

La crisis económica motivó no solo recortes de gasto público, sino que también elevó el control. La Ley de Estabilidad Presupuestaria aprobada en 2012, además de priorizar el pago de la deuda, impuso la obligación de que las entidades locales remitiesen a Hacienda antes del 31 de marzo de cada ejercicio los datos sobre las retribuciones de los cargos electos.

El año pasado, 270 municipios cumplieron ese trámite. El saldo global resulta similar al de 2016, cuando el gasto alcanzó los 27 millones, si bien entonces los concellos opacos fueron 34. Los cambios generados en el ámbito municipal por los comicios del pasado mayo alterarán esos números, a la vista de algunas subidas de sueldo, como la de la alcaldesa de A Coruña, la socialista Inés Rey, que cobrará 30.000 euros más al año que su antecesor, Xulio Ferreiro (Marea Atlántica).

Según Hacienda, durante el año pasado no recibieron un euro los alcaldes de Valga (José María Bello Maneiro), Beariz (Manuel Prado), Larouco (Joaquín Bautista), Maside (Celso Fernández), A Mezquita (Rafael Pérez), Guitiriz (Regina Polín), Guntín (Jesús Carreira), O Páramo (Gumersindo Rodríguez), Xermade (Roberto García), Toques (Miguel Buján) y As Pontes, si bien en este último caso el regidor, el socialista Valentín González Formoso, ya ingresó 65.831 euros por ostentar la presidencia de la Diputación de A Coruña. Algunos de ellos ya no están en el puesto, el de Guntín cobraba de la Diputación y el de Xermade fue obligado a no recibir dinero por la oposición, pero la justicia amparó este año su demanda de retribuciones.

Esta radiografía muestra que algo más del 16% de los políticos locales cobra un salario fijo, bien por una dedicación exclusiva, bien por una parcial. Es el caso de 482 ediles de los 2.982 analizados. Por tanto, el 84% solo cobra dietas. El abanico es amplio y oscila entre los 62.458 euros de una dedicación exclusiva y los 44.858 de una parcial en Vigo y los 10.024 de Portas y los 2.800 de Pazos de Borbén, respectivamente. Además, los ingresos más altos de un edil sin dedicación exclusiva son 28.247 en Vigo.

Las ciudades, sin contar Ourense, copan el 17% de los 23,3 millones en sueldos con casi 3,9: 925.646 euros de Vigo, 783.398 de Santiago, 633.712 de Pontevedra, 625.157 de A Coruña, 613.557 de Lugo y 303.304 de Ferrol.

El alcalde que más cobró fue el vigués Abel Caballero (75.382), seguido del de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores (71.466). En el caso de las diputaciones, la presidenta de la de Pontevedra recibió 74.013; el de Ourense, 72.325; y el de Lugo, 65.832.