En el primer trimestre del año, Galicia crecía una décima menos que el conjunto del país. En el segundo, la diferencia con respecto al crecimiento del PIB estatal es ya de tres décimas. Con las cifras aportadas ayer por el Foro Económico de Galicia -2% de crecimiento interanual para la comunidad y 2,3% para España-, la divergencia se acrecienta, aunque en ambos casos se mantienen por encima de las cifras en las que se mueve la Unión Europea (1,4%) y la zona euro (1,2%), en un contexto en el que los datos sitúan a Alemania "al borde de la recesión". Precisamente la "evolución" de la economía germana es uno de los factores que los expertos del Foro Económico de Galicia consideran que "influye" en "gran parte" en la ralentización de la actividad económica en Galicia, además de "la incertidumbre política" y "las tensiones comerciales".
Así consta en el informe de coyuntura presentado ayer por el Foro Económico de Galicia, en el que concluyen que la economía gallega "reafirma la ralentización" de su ritmo de expansión y que, lo que crece, lo hace sobre todo gracias al dinamismo del gasto de las familias (un 3,5% más que un año atrás), mientras se ve lastrada por la contracción del sector industrial, especialmente de la industria manufacturera (al revés de lo que sucede en el conjunto del país), y por las aportaciones negativas, que se prolongan ya a lo largo cinco trimestres, del sector exterior.
Por un lado, el director del Foro Económico de Galicia, Santiago Lago, en línea con declaraciones anteriores, instó a relativizar los datos al no considerar la desaceleración "dramática", pero dado que es "continua en el tiempo", como apuntó, también considera que "es el momento de repensar las cosas" y de "reaccionar a la realidad". Por ello entiende que es bueno que Galicia cuente con presupuestos, que, matiza, deben aprovecharse con "nuevas políticas". También el director del informe de coyuntura, Fernando González Laxe, indicó, por ejemplo, que las medidas de internacionalización de empresas promovidas por el Ejecutivo autonómico no están "resultando exitosas". A su juicio, "hay que "reaccionar" ante problemas como el Brexit o la transición energética y "no esperar al último día", informa Europa Press.
Los datos puestos sobre la mesa ayer por el Foro Económico permiten constatar que la desaceleración experimentada por el crecimiento del PIB en Galicia llega casi a un punto (9 décimas) si se lo compara al esitmado un año atrás y el 2% es la tasa más reducida desde el primer trimestre de 2015. Además, en lo que respecta en concreto al segundo trimestre, el incremento de la actividad económica es de un 0,3%, el valor más reducido desde el segundo trimestre de 2014, cuando se limitó a un 0,1%.
El "motor" del crecimiento durante el segundo trimestre de 2019 lo lleva la demanda interna, con una contribución superior en Galicia a la registrada en el conjunto del Estado, gracias al "dinamismo" en el gasto de las familias, pero también a la inversión de la administración.
Su aportación positiva al crecimiento agregado del PIB en términos reales asciende a 3,3 puntos, el valor "más elevado" desde el tercer trimestre de 2007. Por el contrario, subrayan desde el Foro, la demanda externa detrae 1,3 puntos al crecimiento del PIB en el segundo trimestre. El saldo exterior neto encadena cinco trimestres con una aportación negativa, lo que no ocurría, indican, desde 2005.
Pese a la ralentización económica, apuntan, el mercado de trabajo gallego mantiene su tendencia "positiva" si se analizan la ocupación y caída del desempleo. Con todo, inciden en "elementos preocupantes", como la "continua caída de la población activa", sobre todo jóvenes.
