La juez que con mano de hierro ha imputado en la mayor trama de corrupción destapada en Galicia a más de un centenar de políticos, funcionarios y empresarios acaba de perder su destino en el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo. Por unanimidad, el pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), acordó ayer desestimar el recurso interpuesto por la magistrada y ratificó la sanción de siete meses y un día de suspensión de funciones de desatención en el ejercicio de las competencias judiciales. El máximo órgano de Poder Judicial ordena así apartar de su puesto a De Lara, una juez que suma más de 200 investigados en casi una decena de causas de gran trascendencia pública, la mayoría relacionadas con delitos de corrupción, en sus doce años al frente del Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo.

El CGPJ le atribuye una falta muy grave por "desatención o retrasos injustificados en la instrucción" y por tomar decisiones que, con "manifiesto abuso procesal", causaban ficticios incrementos del volumen de trabajo. Al ser superior a seis meses, la sanción implica la pérdida de destino y a magistrada tendrá que volver a concursar para optar a una plaza en otro juzgado. El acuerdo del pleno aboca a otro juez a asumir la carga de trabajo en manos de De Lara hasta ahora, entre ellas macrocausas como la Pokemon, Carioca, Pulpo o Cóndor.

La decisión del pleno del CGPJ agota la vía administrativa, por lo que la sanción será ejecutiva una vez notificada, según detallan desde el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). No obstante, el letrado de la magistrada ya había anunciado que en caso de nos prosperar su recurso recurrirían ante el Tribunal Supremo, donde De Lara puede instar la suspensión de la sanción como medida cautelar.

Horas antes de conocerse el fallo, el abogado que se ocupa de la defensa de la juez, el letrado Agustín Azparren, había confirmado que incluso "hay una puerta abierta para recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos", porque "existen precedentes en Portugal", con el caso de "tres juezas que fueron sancionadas".

La acumulación de críticas del sector de la judicatura a De Lara por los reveses judiciales en la Pokemon y la lenta instrucción de las macrocausas que instruye, llevaron al Poder Judicial a abrir una inspección extraordinaria a las investigaciones dirigidas por la juez titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo. Juzgado que con ella al frente se convirtió en el juzgado de provincias con más macrocausas contra políticos, según su propio abogado defensor. De hecho, en la última década De Lara ha dirigido las mayores investigaciones contra la corrupción en Galicia.

La lista de víctimas de Pilar de Lara a la espera de juicio es larga. En sus instrucciones han sido imputados cargos públicos de todos los colores políticos. Desde concejales y alcaldes hasta exconselleiros e incluso líderes de partidos que se vieron obligados a dimitir para evitar que la investigación en curso pasara factura a su persona y a las siglas de su formación.

En el reguero de dimisiones por las instrucciones de Pilar de Lara figuran el exlíder del PSdeG José Ramón Gómez Besteiro, el exalcalde de Ourense Francisco Rodríguez y su homólogo en Santiago Ángel Currás, así como el exconselleiro Fernando Blanco.

El exalcalde de Lugo Xosé Clemente López Orozco también dejó la política tras verse salpicado por las investigaciones, aunque ha sido desimputado hasta en seis ocasiones sobre las causas instruidas por la juez.

Al poco de conocer la decisión del pleno del Poder Judicial, Orozco reaccionaba así en Twiter: "Solo siento el enorme sufrimiento que me hizo pasar a mí, a mi Familia y a mis amigos. Y seguro que también a otros inocentes. No señora juez, no; no todos los políticos somos unos delincuentes. El CGPJ y otros jueces nos devuelven el respeto a Justicia".