Frente al "mundo de Yupi" y a la "Arcadia feliz" que a, a su juicio, percibe de Galicia el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo desde su "atalaya" del Monte Pío, el diagnóstico que hizo de su gestión la líder del BNG Ana Pontón durante el debate sobre el estado de la autonomía dibuja una comunidad que la "preocupa", una comunidad sin "agenda de futuro" y que "pasó de la insumisión a la intrascendencia política con el gobierno del PP".

Para Pontón, el mandatario gallego deja una "herencia envenenada" tras una década "negra" de gobierno, "un país en el que la mayoría vive peor", frente a la que propuso un antídoto: "Precisamos menos Madrid y más Galicia si queremos conquistar un futuro mejor para este país", una encomienda en la que propuso la opción del BNG frente a un líder de un gobierno que ve "agotado, sin proyecto y que deja a Galicia en situación de irrelevancia política". "No queremos su Galicia bonsai. En el BNG queremos una Galicia fuerte y vigorosa como un roble", proclamó.

Pontón cuestionó el valor de las promesas de Feijóo, su galleguismo de "hojalata" y reprobó que su Ejecutivo "no estuvo a la altura ni en los momentos fáciles ni en los más duros". Así, desgranó una "década de sombras" como "reflejo de un presidente acomplejado" e "incompetente que cayó en la irrelevancia". Entre otros reproches, le recordó que se cebó con la sanidad pública o que en la dependencia hay muchas zonas de sombra. En esa línea, cuestionó que ante el déficit de recursos "lo que nos viene a decir señor Feijóo es que la política social de este país depende de la chequera de un multimillonario". También cuestionó que el presidente recurra al "baúl de los recuerdos" para rescatar proyectos como "Galicia Calidade" o el propio Xacobeo. Para Pontón, la "solución" a las cinco crisis en las que el PP deja a Galicia "sumida" (demográfica, económica, de bienestar e igualdad, ambiental y de autogobierno, donde incluyó el "desfalco" de las cajas) "no va a venir por encomendarse al Apóstol, se necesita una nueva estrategia económica para poner al país a producir y no fiar todo al turismo".

"Galicia se merece más, tiene que mirar hacia el futuro y usted, señor Feijóo, representa el pasado", defendió. En esa línea, planteó que se precisa en la presidencia una persona "que conozca la realidad del cada día de la gente del país, merece un gobierno que confíe en el país, un gobierno trascendente, con voz propia en Madrid", y ese "es el compromiso" que asume el BNG en el debate: "trabajar para ganarnos el futuro prometedor que Galicia merece". "Menos Madrid y más Galicia", sintetizó.