Tolerancia cero con las novatadas. No se va a dejar pasar ni una. Lo que era un compromiso teórico del actual rectorado, esta semana la Universidade de Santiago lo ha llevado a la práctica y además de forma contundente. Ha abierto dos expedientes sancionadores contra alumnos, con posibilidad de abrir un tercero o ampliar uno de los existentes, por hacer novatadas en las residencias de estudiantes. Están identificados los presuntos culpables y ahora lo que se discute es cuánto durará la expulsión del colegio mayor, porque sanción va a haber, según confirmó ayer el vicerrector de Estudiantes, Víctor Arce.

Los jóvenes con plaza en alguna de las residencias de la Universidade que ofrecen alojamiento están advertidos desde el primer día que no se consentirá ninguna novatada. "Se les explicó al inicio del curso y se dejó bien claro que no las íbamos a consentir, pero hay quien no lo entiende y cree que no son para tanto y acaban haciéndolas", comenta el vicerrector.

Así, pese a las advertencias, esta semana, recién iniciado el curso, las novatadas volvieron a las residencias de estudiantes. Y el rectorado tuvo conocimiento de dos: una por la denuncia de una víctima de estos "ritos de iniciación" y otra por la información que recabó la propia Universidad.

La consecuencia es que abrió dos expedientes sancionadores independientes, uno de oficio y otro a raíz de la denuncia. En el banquillo figura un grupo de estudiantes que, según Víctor Arce, no supera la docena.

Ahora, prosigue la investigación para determinar la responsabilidad de cada uno y la sanción, que, como advierte el vicerrector, será la expulsión de la residencia en la que están alojados. Porque serán echados, pero mientras en unos casos será por unas semanas o meses, en otros puede ser para todo el curso o incluso de forma definitiva. No obstante, seguirán siendo alumnos de la Universidade de Santiago a todos los efectos.

Pero la investigación no está cerrada y el rectorado mantiene abierta la posibilidad de incoar otro expediente sancionador, que sería el tercero, o incorporar el nuevo incidente a una de las causas ya abiertas.

El vicerrectorado ya dio audiencia a casi todas las víctimas y también se escuchará a los presuntos autores de las novatadas, por lo que el proceso será ágil.

Víctor Arce no es partidario de detallar las "bromas" a las que fueron sometidos los alumnos en estos ritos de iniciación, pero cuenta que una fue reventar un huevo contra la cabeza de una estudiante. "No queremos dar información al respecto para no dejar expuesta a la víctima o que luego la señalen sus compañeros y quede marcada para el resto del curso", argumenta.

Este es el primer expediente sancionador por novatadas que se abre en la Universidade de Santiago con el actual equipo rectoral, que lleva dos años en Fonseca. "No sé si ahora hay más que antes o menos, pero lo que pasa es que sí se detectan más", cuenta Víctor Arce, para quien el principio de tolerancia cero con estos ritos se cumple a rajatabla.