La Xunta ha vuelto a analizar esta mañana, en la reunión del Consello, si se dan las condiciones, debido al bloqueo en la investidura de presidente del Gobierno, para poder elaborar los presupuestos autonómicos de 2020. La conclusión es que el Ejecutivo gallego proseguirá con su elaboración como si se estuviera en un escenario normal, pero el presidente, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado que a día de hoy no puede confirmar que la Xunta los pueda presentar. "Las cosas claras", ha destacado tras el Consello. Pero lo que sí tiene claro es que el Ejecutivo autonómico no aplicará ningún recorte en los presupuestos de este año, a los que le faltan 700 millones de euros procedentes del Estado del sistema de financiación y de la liquidación del IVA de 2017.

Las opciones con las que se encuentra Facenda, derivadas del bloqueo de la política y del posible "colapso" de las arcas autonómicas, son, según ha indicado Feijóo, rebasar el objetivo de déficit, aumentar la deuda e incumplir la regla de gasto o recortar el presupuesto de gasto. "Y yo no voy a recortar", ha comentado, señalando así de forma implícita que la Xunta está dispuesta a incrementar su endeudamiento para mantener el gasto.

Durante su intervención, el presidente ha aprovechado para censurar el comportamiento, aunque sin citarlos expresamente, de los máximos responsables de la Federación Española de Municipios y Provincias (Femp), Abel Caballero, y de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), Alfredo García -ambos socialistas- por no quejarse de que la situación de bloqueo en la investidura de Pedro Sánchez suponga que los ayuntamientos gallegos cuenten este año con 100 millones de euros menos, dado que al igual que a la Xunta, tampoco les puede transferir estos fondos de las entregas de cuenta por estar en funciones el Gobierno central. "No he escuchado a ningún responsable de los órganos corporativos de los concellos por los más de 100 millones dejarán de ingresar", ha censurado.