El Ejército del Aire desplegará el próximo jueves un segundo avión de extinción de incendios forestales con otras dos tripulaciones en el aeródromo militar de Santiago de Compostela para reforzar la cobertura en Galicia.
Así lo ha indicado la subdelegada del Gobierno en A Coruña, Pilar López Riobóo, en una conferencia de prensa y ha señalado que en septiembre también se incorporará un tercer avión, ya que "está demostrado que últimamente el peligro de incendios" en esta Comunidad autónoma "se va demorando más en el tiempo".
Por ello, "hay que estar alerta entre finales de verano y principios de otoño", ha apuntado López Riobóo en el aeródromo de la capital gallega.
El despliegue estaba previsto desde la elaboración del plan estival contra incendios preparado por el Gobierno central, ya que según las estadísticas la segunda mitad de agosto es el momento de más riesgo de incendios en toda la campaña, ha indicado.
La subdelegada ha estado acompañada del jefe accidental del aeródromo militar de Santiago de Compostela, el teniente coronel Julio César Rodríguez, y del coordinador de comunicación del 43 grupo de fuerzas aéreas del Ejército del Aire, el capitán Reinaldo Fernández Boyero, quienes han explicado las características de estas aeronaves.
En España hay once aviones de lucha contra incendios repartidos en ocho destacamentos y Galicia, con dos de ellos, será a partir del jueves la que más aeronaves anfibias de alta capacidad tenga, por ser el territorio en que se quema mayor masa forestal.
Estos aviones, operados por tres tripulantes -dos pilotos y un mecánico- tienen una longitud de treinta metros, un llamativo color rojo y amarillo para facilitar su visibilidad, y cuentan con una capacidad de carga de 6.000 litros de agua, que acostumbran a recargar en una docena de segundos en embalses, rías y lagos.
En paralelo a esa labor prioritaria de extinción, esos aparatos pueden ejercer una labor de apoyo en misiones de rescate, en las que, además de sus tres tripulantes, pueden llevar hasta dos especialistas en búsqueda, según han explicado.
El dispositivo desplegado en Galicia está a disposición de la Xunta, aunque podrá operar en otras comunidades en caso de darse un incendio de grandes dimensiones y de no haber otros recursos suficientes cercanos.
