La Confederación de Anpas Galegas censuró ayer la permisividad de la Xunta en la regulación del juego y de sus nuevas fórmulas, sobre todo por internet. Los padres de alumnos sostienen que el Gobierno gallego, que está precisamente elaborando una nueva ley del juego, piensa más en los intereses del sector comercial y en los efectos recaudadores que en el bienestar general.

"La Xunta pretende consolidar como normalizada una práctica de la que tenemos que protegernos porque sus consecuencias globales son conocidas y están estudiadas con detalle", se queja Anpas Gallegas, que asegura que su objetivo es hacer que los jóvenes tengan imposible o muy difícil el acceso al juego.