Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El impacto del bloqueo político en la tesorería gallega

La Xunta se endeuda para tapar un agujero de 530 millones por los impagos del Ejecutivo

Reclama al Gobierno que le transfiera ya los 700 millones que le adeuda - La falta de presupuestos en Madrid podría obligar a Galicia a prorrogar las cuentas de este año

Alberto Núñez Feijóo, tras el Consello de la Xunta. // Xoán Álvarez

La deuda de 700 millones que el Gobierno tiene con Galicia empieza a ahogar a la Xunta, que se ha visto obligada ya a pedir un crédito para poder pagar facturas. Lo más acuciante son un total de 530 millones de euros que están incluidos en los presupuestos de Galicia de este año, pero de los que no se dispone todavía pese a estar comprometidos por Madrid. "Hay un grave quebranto para la tesorería", advirtió el presidente del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, que no ha tardado ni un día en asumir el mandato del Parlamento de Galicia -que el miércoles aprobó una iniciativa en este sentido- y reclamar a la Administracion central que le transfiera las cuantías adeudadas "para seguir pagando facturas y nóminas".

De momento, la Xunta está tapando el "agujero" de 530 millones de euros en sus cuentas recurriendo a la deuda, pero esto no solo eleva el endeudamiento global de la comunidad autónoma sino que pone en riesgo el cumplimiento del déficit a final de año.

Galicia tiene pendientes de percibir del Estado un total de 700 millones de euros, de los cuales 330 se corresponden con la actualización de las entregas a cuenta del ejercicio 2019. Otros 200 millones son de la devolución del IVA de 2017 y 170 millones son incentivos por cumplir las reglas de gasto.

De este dinero, la Xunta incluyó en sus presupuestos de 2019 un total de 530 millones. "Incluimos los 330 millones de entregas a cuenta porque el Gobierno nos comunicó por escrito que podíamos contar con ellos. Y también incorporamos los 200 millones del IVA porque la ministra de Hacienda así se comprometió a hacerlo tras una reunión. Y ya no nos atrevimos a meter los otros 170 millones", argumentó Feijóo, quien aseguró haberse cansado de "excusas" para no tranferir estas cuantías a la comunidad autónoma.

"La inestabilidad política que hay en España no es culpa de ninguna comunidad autónoma", señaló el presidente de la Xunta. En su opinión, no es excusa para negarse a transferir este dinero ni que el Gobierno esté en funciones ni que los presupuestos del Estado estén prorrogados. Así recordó los "viernes sociales" en los que cada semana el Gobierno aprobaba medidas de calado mediante un Real Decreto Ley. No tiene ninguna duda, por lo tanto, de que "es posible" entregar estos 700 millones a Galicia.

Eso sí, tiene que hacerse "de manera inmediata" porque en agosto no hay Consejo de Ministros y si no se soluciona ahora Galicia tendrá que esperar a las liquidaciones de 2021 para recuperar el dinero.

"No hemos tenido estas tensiones de tesorería desde hace años. No nos merecemos esto", señaló enfadado Feijóo ayer, tras el Consello de la Xunta.

Pero no será el único perjuicio para Galicia derivado de la situación de inestabilidad política a nivel nacional. Cada año la Xunta presenta su techo de gasto para el ejercicio siguiente a principios de agosto, pero de momento este trámite está en el aire debido a la falta de presupuestos del Gobierno.

Feijóo explicó ayer que la Consellería de Facenda baraja dos opciones: o bien prorrogar los presupuestos actuales a 2020, año en el que se celebrarán elecciones autonómicas, o elaborar unas cuentas nuevas "con criterios de precaución presupuestaria". El presidente de la Xunta se mostró partidario de esta última opción: "a mí no me gustaría prorrogar salvo que sea la única opción legalmente".

Preguntado por las palabras del presidente de la Diputación de Ourense, José Manuel Baltar, en las que daba por seguro que Feijóo sería el candidato del PPdeG en los comicios del próximo año, el titular de la Xunta respondió que hablará del tema "cuando toque" y añadió que esa cuestión "no tiene tanto interés".

Por otro lado, el Consello de la Xunta aprobó ayer varios nombramientos: Corina Porro será la delegada de la Xunta en Vigo, Ignacio López Chaves presidirá el Consello Galego de Competencia, Pablo Casal será director xeral de Orientación Laboral en sustitución de Alfonso Marnotes, y Susana Leguas dirigirá Portos de Galicia. Sobre si Pilar Rojo podría ser la nueva presidenta del Consello Económico e Social (CES), Feijóo se limitó a decir que le parece "un currículum interesante", pero que "no hubo todavía comunicación ni conversación con ninguna persona para presidir el CES".

Compartir el artículo

stats