Accesible para todos los gallegos y durante todos los días del año. Así será la hospitalización a domicilio que vendrá, tal y como avanzó ayer el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, quien anunció que el Consello de la Xunta dará luz verde esta semana a un plan específico para ordenar este servicio hasta 2023 que "marcará un antes y un después". Según explicó en una visita al Hospital Marítimo de Oza, en A Coruña, se trata de un plan "completo para el 100% del territorio", lo que supone que abarcará un 25 por ciento más de lo que cubre en la actualidad este programa que configura una alternativa a la estancia hospitalaria en el domicilio del paciente en patologías que lo permiten. Además estará operativo 365 días al año, mientras ahora funciona de lunes a viernes, explican desde Presidencia.

Pacientes trasplantados o con patología quirúrgica, pacientes crónicos o personas que reciben cuidados paliativos, entre otros, son algunos de los variados perfiles que pueden acogerse a esta posibilidad. En la actualidad, según datos aportados por Núñez Feijóo, se benefician de este tipo de atención unos 5.000 gallegos al año a través del trabajo de 15 unidades y de 45 equipos repartidos por todas las áreas sanitarias. Con la ampliación, Feijóo aseguró: "Conseguiremos que haya un médico todos los días del año en el domicilio de los pacientes", lo que ve un "paso enorme" al evitar "miles de ingresos" en los hospitales gallegos.

En los últimos años, la hospitalización a domicilio (HADO) ha crecido. El año pasado al amparo del programa se realizaron en el Sergas 57.227 visitas, un 10 por ciento más que en el ejercicio anterior, y 6.128 ingresos. Un informe de la Sociedad Española de Hospitalización a Domicilio publicado a finales de 2017 situaba a Galicia como una de las tres autonomías, junto a la Comunidad Valenciana y Euskadi, con un programa específico de hospitalización a domicilio "de ámbito poblacional y con dependencia del servicio autonómico de salud".

La hospitalización a domicilio surgió como alternativa a la hospitalización clásica con tres objetivos, explican desde la Xerencia de Santiago: "mejorar la gestión de las camas hospitalarias, conseguir una mayor integración entre paciente, familia y personal sanitario y servir de puente entre atención primaria y especializada". Para optar al programa, se requiere que la vivienda esté en el área de actuación de HADO -de ahí la relevancia de la cobertura territorial-, una patología concreta, que paciente o familia lo acepte y que exista un cuidador informal.

Un estudio publicado en "Galicia Clínica", realizado por personal del CHUAC, destacó los beneficios de este tipo de hospitalización para el enfermo, al facilitar reducir su estrés y el de su familia, además de permite "disminuir la incidencia de complicaciones", como pueden ser las infecciones hospitalarias. Asimismo señala que otros estudios confirmarían el índice de satisfacción "muy elevado" de los pacientes. El informe también incidía en que de ese modo se pueden "liberar y aumentar la rotación de camas físicas en un sistema de por sí fácilmente colapsable".

Ante el anuncio de Núñez Feijóo de ampliación del programa, el portavoz del grupo parlamentario Socialista, Xoaquín Fernández Leiceaga, reclamaba ayer que vaya asociado a un incremento de plantilla para poder aplicarla. Sin aumentar el número de trabajadores, avisó, supondrá "más presión sobre otra parte de los servicios sanitarios". El parlamentario socialista también cuestionó la cifra de 2.300 profesionales más que hace diez años trabajando en la sanidad gallega que ofreció el mandatario autonómico.