La ruptura de En Marea en dos bloques en el Parlamento silenciará su voz en la sesión de control al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que se celebrará mañana. La marcha de Luís Villares y tres diputados afines al grupo mixto no entrará en vigor en los plenos que comienzan hoy, lo que generaba la incertidumbre de si defendería la pregunta a Feijóo del grupo con el que ha roto. Para evitar más problemas, En Marea ha retirado su iniciativa sobre la opinión del Ejecutivo gallego acerca del crecimiento económico desde 2009 "y sus consecuencias", según confirman fuentes parlamentarias.

La Mesa del Parlamento decidió ayer aplicar el mismo criterio al pleno ordinario que a la sesión extraordinaria de esta mañana para designar tres senadores autonómicos. El enfrentamiento sobre ese cargo detonó las de facto rotas relaciones en el grupo de En Marea, que perderá cuatro de los 14 parlamentarios con que inició la legislatura. Sin embargo, la dirección del hemiciclo entiende que la petición de divorcio se registró tarde para entrar en vigor en esta sesión, por lo que Villares, Davide Rodríguez, Pancho Casal y Paula Vázquez Verao todavía formarán parte del grupo En Marea.

Fuentes parlamentarias adelantan que ninguno de estos cargos intervendrá en la sesión plenaria, por lo que la voz del grupo estará copada por el sector de Podemos, Anova y Esquerda Unida que reniegan del partido instrumental. Paradójicamente, ellos representarán la marca En Marea mientras no modifiquen el nombre de su grupo y los miembros del citado partido -Villares y sus tres compañeros- integrarán el grupo mixto.

La pregunta al presidente de la Xunta correspondiente a En Marea había sido registrada por Villares antes de esa ruptura y consta en el orden del día de la sesión, pero fuentes parlamentarias sostienen que ha sido retirada y que ni el que será antiguo portavoz ni ninguno de sus exaliados -sector que aún no ha elegido portavoz- se enfrentarán a Feijóo para evitar el mal trago y erosionar aún más el espacio político rupturista.

La escisión sí se plasmará en el último pleno del período de sesiones, previsto para la segunda semana de julio. Entonces, la Mesa deberá reordenar la ubicación de los cuatro integrantes del grupo mixto, que previsiblemente se situarán en las últimas butacas del hemiciclo, como sucedió la pasada legislatura con los escindidos de AGE.