El socialista Xosé Sánchez Bugallo ha vuelto al cargo de alcalde de Santiago que ya ocupó de 1998 a 2011. Lo hizo por quinta vez y tras retirarse momentáneamente de la política para volver a presentarse como candidato en unas elecciones municipales que, finalmente, han servido para devolver el bastón de mando al PSOE tras dos mandatos en manos del PP y de Compostela Aberta. Tras tomar posesión del cargo apeló a los tres grupos de la oposición al "diálogo" y a "unir esfuerzos" en torno a "objetivos compartidos" para la ciudad.

Bugallo recibió los 10 votos a favor del PSOE, mientras que los 5 ediles de Compostela Aberta, formación del hasta ahora alcalde Martiño Noriega, optaron por la abstención, y los 2 del BNG por el voto en blanco, facilitando así la investidura. Los ocho ediles del PP apoyaron a su propio candidato, Agustín Hernández.

Con un gobierno en minoría, en una situación "semejante a la de la anterior corporación", pero "con actores diferentes", admitió en su primer discurso como alcalde -visiblemente emocionado- que una situación "en minoría sin más" tendría "limitadas posibilidades de éxito".

Pero el nuevo alcalde no ha querido "descartar" un pacto o un acuerdo con otras formaciones políticas para garantizar la mayoría, por ser una "fórmula válida que ofrezca estabilidad", aunque en todo caso mostró su preferencia "con absoluta sinceridad" por un gobierno en minoría, que busque "un escenario de diálogo y negociación permanente" y "sin exclusiones".

El ya regidor compostelano abogó en varias ocasiones, en un discurso de casi 20 minutos, por este diálogo en torno a "objetivos compartidos" para "unir esfuerzos". "Es mucho más lo que nos une que lo que nos separa o si me permiten decirlo de otra forma, nos une Santiago", destacó el regidor.

Así, instó a los tres grupos de la oposición, sin citarlos de forma directa, a que ante los "retos trascendentales" que tendrá que afrontar la ciudad, se pongan las "condiciones" para construir las "oportunidades del futuro". "Sólo si sabemos a dónde queremos llegar, cuál queremos que sea el papel de Santiago, podremos identificar las oportunidades para la ciudad", añadió.

En el salón de plenos en el que se ha celebrado la investidura solo han estado presentes ocho autoridades invitadas, entre las que se encontraba el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada; el expresidente de la Xunta, el socialista Emilio Pérez Touriño; el exministro socialista José Blanco.