El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, ve ante sí la posibilidad de "un cambio histórico" en la Diputación de Ourense. Y, por esa razón, ha apelado a todas las fuerzas políticas "sin excepción" a un pacto por la regeneración que sirva para "poner fin a la empresa familiar" de Baltar. Incluso instó al líder del PP y presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a tener "altura de miras" porque las opciones son "caciquismo y nepotismo o regeneración o futuro".
Además, en alusión a Ciudadanos, Caballero advirtió a Albert Rivera que lo que ocurra con la Diputación de Ourense será su "prueba de fuego".
En el primer comité nacional de los socialistas gallegos tras las elecciones, se aprobó una resolución en la que plantea que en aquellos ayuntamientos en los que no hay mayoría absoluta, los socialistas contribuyan con sus votos "a que accedan a las alcaldías y gobiernos municipales las fuerzas progresistas y de izquierdas", frente a las opciones conservadoras y de derechas. Además, el PSdeG propone encabezar esas mayorías de progreso cuando sea el partido más votado de la izquierda. Se trata del marco por el que han de regirse los pactos en los ayuntamientos que se constituyen el próximo sábado día 15.
Caballero recordó ayer además que su desembarco en el Parlamento de Galicia será "en las próximas semanas", de momento sin mayor concreción que "cuando los tiempos políticos así lo marquen".
El secretario xeral de los socialistas gallegos ensalzó, en todo caso, la figura del portavoz parlamentario, Xoaquín Fernández Leiceaga, quien continuará ocupando ese cargo cuando el líder del partido ingrese en la Cámara gallega, ya que Caballero asumirá la función de presidente del grupo socialista en el Pazo do Hórreo.
El líder socialista aprovechó su intervención en el comité nacional para despedirse del actual presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, al que ve, ya en el ocaso de su ciclo político, como un "rey desnudo". "No tiene ropa de gestión ni de proyecto político para Galicia", censuró.
