"Le entregamos nuestro manifiesto, para que se lo haga llegar a Pedro Sánchez y pedimos sensibilidad con los 5.000 trabajadores que pueden irse al paro". Es el resumen del primer encuentro entre el personal de Ence en Lourizán y un miembro del Gobierno central desde que en marzo se supo que la Abogacía del Estado dejaba de defender en los tribunales la prórroga de la concesión de Costas y ponía en duda su legalidad.

Los presidentes de los comités de empresa de la fábrica, Ignacio Acuña, y de las oficinas, Ana Cedeira, fueron recibidos ayer por la ministra de Trabajo en funciones Magdalena Valerio, minutos antes de un almuerzo-mitin del PSOE en Pontevedra. Decenas de trabajadores vinculados a Ence se concentraron ante la puerta principal y el acceso del parking del hotel donde se celebraba la comida, dentro de los actos electorales del 26-M.

Megáfonos, bocinas, pancartas y consignas contra la anulación de la prórroga de la pastera resonaron durante varias horas y se logró una reunión con Valerio que duró más de un cuarto de hora. "Fue muy amable y a mí personalmente me sorprendió que nos recibiera", confesaba Acuña después de una charla en la que también estuvieron presentes el líder de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada y la subdelegada en Pontevedra, Maica Larriba.

Al término, Valerio rehusó hacer declaraciones y se dirigió al encuentro con los militantes de su partido. Por su parte, Cedeira y Acuña regresaron a la calle para trasladar a los manifestantes los términos del encuentro. Los representantes de Ence les comunicaron que la ministra se mostró receptiva; aceptó llevar el manifiesto al presidente del Gobierno -el que intentaron entregar sin éxito al propio Sánchez en Vigo el 24 de abril, y dejó patente "su solidaridad" con el empleo, según la versión de los comités. Sin embargo, no se pronunció sobre el futuro de la pastera al tratarse de un asunto judicializado. "Nos dijo que hay que aguardar a lo que decidan los jueves, pero al margen de lo que decida la Audiencia Nacional, lo que queremos es que el Gobierno nos dé una solución", indican los trabajadores.

El comité trasladó a Valerio su malestar por la distintas posturas del PSOE con respecto a las plantas de Lourizán y Asturias, ya que en el principado cuenta con el respaldo del partido.