La Guardia Civil ha detenido al gerente de una empresa de la provincia de Pontevedra por estafar al menos a 27 clientes -entre ellos un concello, dos colegios públicos, hoteles y restaurantes- falsificando los informes y los resultados de los análisis de agua y de presencia de legionela que le contrataban, pero que nunca llegó a hacer. El empresario fue puesto a disposición judicial y el magistrado decretó su libertad provisional con cargos. La mayor parte de sus víctimas pertenecen a los ayuntamientos de la comarca de Arousa, aunque también los hay en Vigo, A Estrada, Caldas de Reis o Padrón.
La empresa -dedicada a tratamientos de desinfección y control de plagas- tenía una amplia cartera de clientes, la mayoría en la provincia de Pontevedra, pero no disponía de laboratorio propio para realizar los análisis, por lo que se veía en la obligación de remitir las muestras a una firma externa. El caso es que en un determinado momento, el detenido dejó de recurrir a este laboratorio para ahorrar coste y empezó a falsificar los informes y los resultados, que luego presentaba a los clientes para poder cobrar por el trabajo encomendado.
La operación policial, denominada Legiogal, se inició el pasado mes de octubre cuando un concello de Pontevedra presentó una denuncia ante la Guardia Civil por sospechar de la existencia de irregularidades. En este ayuntamiento,la empresa era la encargada de analizar el agua de la traída municipal, la presencia de legionela en instalaciones deportivas, las fuentes y la piscina municipal.
Tras las primeras comprobaciones se detectó que un alto porcentaje de las analíticas de agua y legionela era todo inventado porque la empresa, para ahorrarse los honorarios del laboratorio externo, no le enviaba las muestras.
A partir de ese momento, informa la Guardia Civil, se creó un grupo de trabajo mixto entre el Seprona y la Consellería de Sanidade para valorar la posible afección a la salud pública, el número de empresas estafadas y la cantidad de análisis de aguas de consumo y de presencia de legionela que supuestamente se habrían falsificado.
La conclusión es que la Guardia Civil cree que al menos 27 clientes pudieron resultar estafados y que del total de informes realizados por la empresa sobre agua, 159 serían falsos, en su gran mayoría relativos a los tratamientos de legionela.
Entre los clientes supuestamente estafados, además del ayuntamiento que formuló la primera denuncia -que fue además donde se descubrió el mayor número de falsificaciones (26)-, también se detectaron otros 26 establecimientos, en su mayor parte hoteles y restaurantes, pero entre los que figuraban dos centros públicos de enseñanza en las provincias de Pontevedra y A Coruña. El mayor número de locales donde se detectaron informes falsificados pertenecen a la provincia de Pontevedra, con 21 casos en total.
En su mayor parte están ubicados en la comarca de Arousa (Vilagarcía, Cambados y Meaño), aunque también se descubrieron afectados en otras zonas de la provincia como Vigo, A Estrada y Caldas de Reis.
En la provincia de A Coruña otros seis establecimientos que tenían contratados sus servicios con la misma empresa fueron víctimas de la estafa; cuatro de ellos en Padrón y dos en Ribeira.
Las investigaciones concluyeron con la detención del gerente de la empresa denunciada por un delito continuado de estafa a una pluralidad de personas que habían contratado la prestación de unos servicios retribuidos que no se prestaron, habiendo sido engañados mediante la comisión de un delito continuado de falsedad documental.
La Guardia Civil llevó a cabo un registro en la sede social de la empresa encargada, donde se incautaron varios ordenadores y dispositivos de almacenamiento masivo que están pendientes de peritar.
El detenido fue puesto a disposición del juzgado de Instrucción de guardia de Cambados, que decretó su libertad provisional con cargos.
