La diputada de En Marea en el Congreso, Alexandra Fernández, ha anunciado esta tarde que abandona la primera línea política. La joven viguesa, elegida diputada por Pontevedra en las elecciones de 2015, explica en un comunicado en su página de Facebook los motivos de su renuncia.

La representante pública ha lanzado este mensaje con la disolución de las cámaras y el inicio del período electoral previo a las elecciones del 28 de abril. "Despois dunha profunda reflexión, poño fin, pois, a unha etapa dura e intensa", explica en un escrito en el que detalla los asuntos que más han marcado su carrera en el Congreso. "Tiven moi claro desde o primeiro momento que o meu tempo na política institucional había ser limitado. Nestes tres anos non fixen máis que reafirmarme na importancia de estar na política por convicción e non por necesidades persoais", continúa y a la vez descarta su participación en los próximos comicios como posible representante electa. Fernández continuará en política pero como militante de Anova y retomará sus estudios de Arquitectura.

En su despedida, Alexandra Fernández alude a las dificultades de articular un partido en construcción y del que fue nombrada portavoz. Retos que asumió con los "erros da inexperiencia, pero tamén con toda a forza da vontade". También destaca entre su labor el "compromiso persoal para que a comisión de investigación de Angrois saíse adiante" y su empeño por reforzar las infraestructuras y las comunicaciones en Galicia como el Corredor Atlántico.

Fernández figuraba en la quinielas para ocupar un puesto destacado en la candidatura del partido instrumental a las elecciones generales del próximo 28 de abril, en las que En Marea, previsiblemente, concurrirá por separado de Anova, EU y Podemos.

La viguesa, enfrentada a la dirección de su partido, Anova, desde hace más de dos años, permanecía distanciada del resto de sus compañeros de En Marea en el Congreso, a los que llegó a criticar duramente de manera pública acusándolos de actuar con motivaciones personales y de haber convertido la representación de la confluencia gallega en las Cortes en un "satélite" de Unidos Podemos.