La formación nacionalista Anova y el alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, han hecho un llamamiento este lunes a reconducir la ruptura del espacio de confluencia gallega que, a día de hoy, parece abocada a presentarse por separado a las elecciones generales del próximo 28 de abril debido al enfrentamiento entre la dirección del partido instrumental En Marea y el sector crítico, integrado por la propia Anova, Esquerda Unida, Podemos y las mareas de Santiago, A Coruña y Ferrol.

También este lunes, minutos después de los mensajes lanzados por el portavoz nacional de Anova, Antón Sánchez, y el regidor herculino; el portavoz orgánico de En Marea, Luís Villares, aseguraba que la división en dos candidaturas del espacio supondría "un suicidio político", aunque ha marcado el terreno al resto de agentes: el partido instrumental "es el único espacio" para la unidad, pues permite la participación de personas no afiliadas a organizaciones y garantizaría la posibilidad de configurar grupo propio en el Congreso.

"Dos candidaturas sería un suicidio político. No solo para esas dos candidaturas, sino para las alcaldías del cambio", ha incidido el magistrado en excedencia, que asegura que En Marea no está rota a pesar de que Anova, EU y Podemos ya avanzasen en los últimos días su intención de repetir la coalición electoral de 2016 sin contar con la dirección del partido instrumental.

"No comparto esa especulación de dos listas", ha añadido Villares, que dice que de los comunicados de Anova, EU y Podemos (en los que ignoran a En Marea) "no se desprende" que vayan a presentar una candidatura alternativa a la del partido instrumental.

"Es evidente que si no vamos juntos habrá una decepción (electoral). No contemplo otro escenario que no sea la unidad de todo el espacio político", ha incidido Villares, para el que solo existe un lugar donde pueda darse ese escenario de unidad: bajo el paraguas de En Marea como partido, no como coalición.

Anova decidirá el sábado

Dos días después de que Anova apelase a iniciar un diálogo con sus "aliados" para reforzar la unidad popular a través de un comunicado en el que no menciona a En Marea, su portavoz nacional, Antón Sánchez, ha ofrecido declaraciones a los medios en los pasillos del Parlamento, donde ha emplazado al próximo sábado como día en el que la dirección de la formación nacionalista decidirá su postura definitiva sobre la configuración de alianzas para el 28 de abril.

"No hay que anticipar cuestiones. No está definida la fórmula de concurrencia electoral. Nuestra apuesta es lograr la mayor amplitud posible en el campo de la izquierda", ha aseverado el también viceportavoz de En Marea en la Cámara gallega.

Antón Sánchez ha apelado a "retomar el hilo conductor que hizo ilusionar a mucha gente" con el proceso de confluencia en candidaturas de unidad de las fuerzas de izquierda iniciada con la creación de la coalición electoral Alternativa Galega de Esquerdas (AGE) para las autonómicas de 2012, el nacimiento de las mareas municipalistas en 2015 y la creación del partido instrumental En Marea en el verano de 2016.

Precisamente la configuración de En Marea como partido instrumental y de adscripción individual fue promovida por Anova y las mareas municipalistas de Santiago, Ferrol y A Coruña. Esta configuración estuvo a punto de provocar que Podemos Galicia se presentase en solitario a las elecciones autonómicas de 2016, ya que los inscritos de la formación morada habían apostado por la fórmula de coalición.

Finalmente, la intervención del líder de Podemos, Pablo Iglesias, recondujo la situación en el último momento y el partido morado se integró en la candidatura de En Marea, en la que sus miembros coparon gran parte de los puestos de salida.

Ahora, Esquerda Unida y Podemos Galicia pretenden reeditar la fórmula de coalición con la que se presentaron, junto con Anova, a las generales de 2016. Ambas formaciones entienden En Marea como un modelo exclusivamente pensado para las autonómicas de 2016. Con todo, Podemos y EU trataron de hacerse con el control del partido instrumental en sus últimas primarias, en las que, a través de un proceso convulso y crispado, Luís Villares renovó su liderazgo.

Xulio Ferreiro

Otra de las referencias del espacio político, el regidor herculino, Xulio Ferreiro, también ha salido este lunes, a través de un mensaje publicado en su cuenta de Facebook, en defensa de encontrar puntos de encuentro entre los bandos enfrentados de cara a evitar la presentación de dos listas el próximo 28 de abril. La publicación ha sido compartida por su homólogo santiagués, Martiño Noriega, que se posiciona, de este modo, en la línea marcada por su partido, Anova, y la marea herculina.

"Creo que debemos hacer un último esfuerzo e impulsar una alianza amplia en la que todos y todas, nos llamemos como nos llamemos, seamos lo que seamos, encontremos un lugar desde el que remar en la misma dirección. Mareas municipalistas, partidos de la confluencia y la propia En Marea, en pie de igualdad, deberíamos hacer un ejercicio de realismo y responsabilidad y construir una nueva coalición generosa y solidaria para disputarle a la derecha en Galicia las elecciones generales del próximo 28 de abril. Se lo debemos a la gente", ha publicado el líder de Marea Atlántica.

En su mensaje, Ferreiro sitúa al mismo nivel de importancia todos los "pasos adelante y pasos atrás" dados en la construcción de la llamada unidad popular. "El espacio es tan deudor de la creación de AGE como del 'Acuerdo de Mazarelos', tiene tanto que ver con la Marea Atlántica y con otras candidaturas de liderazgo ciudadano como la asamblea constituyente de En Marea en Vigo. Renunciar a uno solo de esos episodios de nuestra historia común es renunciar a lo que somos y a lo que conseguimos", incide el alcalde coruñés.

No obstante, Luís Villares defiende que la constitución de En Marea en su asamblea fundacional de Vigo supuso la creción de "la mayor herramienta para consolidar el cambio en Galicia", por lo que ha mostrado su preocupación porque exista "la tentación de que la única manera de concurrencia era la coalición", un formato que, según el magistrado lucense, limita los mecanismos de participación interna.

"Nos pareció un gran acierto la configuración de En Marea como se impulsó en el 2016. Si hoy en día pueden participar las mareas municipales es que ya no hay coaliciones", ha espetado Villares, que ha incidido en que a lo largo de los últimos días ha mantenido contactos con los líderes del resto de agentes del espacio político.

"Si ahora fuésemos como coalición, ¿quién decidiría los candidatos?", se ha preguntado Villares, que ha recordado que el "sistema de primarias" de En Marea --organización en la que está permitida la "doble militancia-- abre la puerta a que "cualquiera" pueda postularse como candidato, desde personas individuales a "partidos como Podemos".