El PP exhibió músculo esta mañana para acelerar de cara a las elecciones municipales del 26 de mayo y lo hizo blandiendo a quien consideran su mayor activo: Alberto Núñez Feijóo. Este arremetió contra el PSOE por el trato a Galicia en los presupuestos, contra los “líos” de las mareas y contra la alianza del BNG con Bildu, pero también marcó territorio frente a Ciudadanos o Vox, pues presumió de gestión. “Además de saber decir “Viva España” o “Viva Galicia” hay que saber gobernar”, proclamó.

Los populares reunieron en Santiago a unas 1.500 personas en un acto de presentación de sus 313 candidatos a las Alcaldías que se inició con una paradoja, pues pincharon la canción “People have the power”, de la estadounidense Patti Smith, símbolo de la contracultura y de raíces punk.

Allí, Feijóo recordó la potencia de su organización, la más votada en 202 de los 313 concellos en las pasadas elecciones locales de 2015, si bien gobiernan en 166.

Ese aspecto jalonó las intervenciones de dos de los presidentes provinciales del partido. Alfonso Rueda (Pontevedra) y Elena Candia (Lugo) lamentaron que no ostente el bastón de mando quien lidere la lista más votada, si bien el PP aplaudió en Andalucía lograr la Presidencia de la Junta pese a ser segunda fuerza por detrás del PSOE.

Feijóo, si embargo, se centró en defender la hoja de resultados de su formación en la Xunta, donde, dijo, demostraron “saber llegar a fin de mes con menos recursos”, en alusión al desplome de recursos que padeció durante la crisis que en 2014 supuso 2.200 millones de euros menos que cuando llegó a San Caetano.

“Nosotros queremos un Galicia que progrese para una España que progrese”, expuso. “No se puede defender España sin defender Galicia”, añadió tras recibir ataques por parte de Vox, que lo calificó de nacionalista por reclamar un techo competencial equiparable a Cataluña o País Vasco, tal como recoge el Estatuto de Autonomía.

Feijóo señaló el 26-M como la oportunidad para poner fin a “cuatro años de inutilidad”, en alusión a las mareas, y de castigar al PSOE por unos presupuestos que recortan la inversión un 20% en Galicia.

De hecho, el acto estuvo marcado por el escarnio de los tres alcaldes de las mareas urbanas coruñesas, del regidor socialista de Vigo, Abel Caballero, y de nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores, que gobierna Pontevedra.

Fragmentos de los dirigentes bailando, tocando la guitarra o parte del discurso en inglés de Caballero tras encender el alumbrado navideño en la ciudad olívica se mezclaron titulares de prensa sobre las críticas de las víctimas del desplome del suelo en O Marisquiño o la compra de un piso a un afín a la Marea Atlántica.