Aumentar la oferta de plazas MIR para las próximas convocatorias puede ser una de las vías que ayude a paliar al déficit de facultativos -especialmente de Familia y Pediatría- que padece tanto la comunidad gallega como a nivel nacional. Este refuerzo llegará el próximo año con 23 plazas nuevas para Galicia, tal y como anunció ayer la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo durante su visita a las instalaciones del Laboratorio Europeo de Referencia de Biotoxinas Marinas de Vigo. Esta oferta sumará otras 19 plazas de Enfermería en una única convocatoria. Y es que la ministra descartó la petición del Sergas de convocar pruebas extraordinarias. "No podemos inventarnos las plazas y tampoco las convocatorias", manifestó Carcedo.

Por el momento, la única convocatoria en firme es la que se celebrará este sábado, en la que se ofertarán en Galicia 404 plazas de todas las especializadades, 105 para Medicina Familiar y Comunitaria (siete más que el año pasado) y 20 para Pediatría.

El ministerio defiende que se "ha exprimido al máximo la capacidad docente de la Xunta" no siendo posible ofertar un número mayor de plazas. "El sistema MIR emplea la capacidad de los servicios de salud de las comunidades, además de acreditar las unidades docentes que existen. El incremento de las plazas del 5% para este año lo hemos hecho de acuerdo con su capacidad docente acreditada, partimos de la solicitud y demanda del jefe de Servicio de la unidad correspondiente. Hemos dado por buena esa capacidad, forzando al máximo esta disponibilidad", aclara Carcedo.

La acreditación de estas unidades docentes no son procesos sencillos, ya que los centros deben aportar -y justificar- muchos requisitos tales como carga asistencial, recursos humanos, actos clínicos... en cada especialidad para que esta formación sea aceptada. Actualmente el ministerio cuenta con un total de 505 solicitudes en revisión pendientes desde el año 2012.

Gestión autonómica

Además de esta capacidad formativa, la ministra apuntó otro motivo como responsable de la difícil situación por la que atraviesa la sanidad pública: la gestión de las autonomías. Y es que Carcedo insistió en que el Ministerio "no tiene responsabilidad" en la falta de médicos y que el problema está en la "distribución de esos profesionales". En este sentido, aseguró que el número de médicos que hay en España "está por encima de la media de los países que hay en su entorno". "El problema está en la capacidad de gestión de las Comunidades Autónomas, tienen que mirar por una distribución equilibrada", defendió la titular de Sanidad.

Carcedo también incidió en que no se trata de un problema actual ni surgido de forma inmediata."Lo que sorprende es que este problema surgió ahora, de repente. Ya se sabía la edad de los médicos y sanitarios. La gestión y planificación de cada servicio de salud depende de la comunidad en cuestión", concluyó la ministra, quien también valoró positivamente la "voluntariedad" de los médicos de ampliar su edad de jubilación o establecer incentivos para fijar la plantilla de profesionales. "El sistema sufrió consecuencias importantes como fue la tasa de reposición, severos recortes... si se ha logrado mantener la misma calidad asistencial y satisfacción de la ciudadania ha sido a costa de un trabajo y una responsabilidad enorme de los profesionales", agradeció Carcedo.