La situación de En Marea continúa a expensas de los pasos y decisiones que deberán tomar las organizaciones que conforman el sector crítico con Luís Villares, vencedor en las primarias celebradas a finales de diciembre y cuyo resultado sigue sin ser reconocido por la lista perdedora, 'Entre Todas'.

El consejo de coordinación de Podemos Galicia -equivalente a la ejecutiva de un partido clásico- se reúne en la tarde noche de este lunes para estudiar los resultados de la auditoría encargada a un perito informático de la consultoría 'Securízame'. Con ella en la mano, la cúpula del partido morado evaluará los pasos a seguir con su papel en el proyecto de En Marea cuestionado por buena parte de sus bases y sus cargos directivos.

Según fuentes consultadas por Europa Press, Podemos tiene previsto presentar públicamente los resultados de la auditoría este martes, momento en el que también será remitida a sus inscritos. Y lo hará por su cuenta, ya que sus socios en la candidatura crítica --EU y Anova-- marcan distancia con los movimientos del partido morado.

En el seno de la formación que dirige el diputado Antón Gómez-Reino existen voces que apuestan por escenificar el distanciamiento con En Marea, aunque reconocen que hacerlo a cinco meses de las elecciones lcoales podría suponer un 'hándicap' para los proyectos municipalistas en los que participan, como Santiago, Ferrol y A Coruña; mareas que participaron en la candidatura del sector crítico.

Así, fuentes del partido morado subrayan que la auditoría evidencia que la plataforma de voto --cambiada tras la paralización del proceso-- presentaba deficiencias de "seguridad" y que la coordinadora de En Marea podría haber infringido la ley de Protección de Datos, ya que el sistema no garantiza la privacidad del voto de sus inscritos.

Además, Podemos estudia llevar el proceso a la vía judicial, si bien algunos de sus miembros creen que esto alargaría una situación y jugaría en contra de las posibilidades electorales en un año con varias citas con las urnas, a las que se podrían sumar un hipotético adelanto de las generales.

Así, más de una semana después de la constitución del Consello das Mareas en el que los 14 asientos que pertenecen a 'Entre Todas' permanecen vacantes, las tres organizaciones políticas que configuraron la coalición --germen del partido instrumental-- para las generales de 2015 estudian por separado qué estrategia seguir respecto a un proyecto común, En Marea, que atraviesa una profunda crisis a cinco meses de unas elecciones municipales que se antojan clave en el futuro del proyecto de la llamada unidad popular.

Esquerda Unida fue la primera en desmarcarse de En Marea. Lo hizo ya antes de la celebración de las primarias, paralizadas a principios de diciembre por un supuesto acceso irregular al censo por parte de miembros del comité electoral que fueron vinculados con la organización que lidera la vicepresidenta segunda del Parlamento, Eva Solla.

Así, tras la reanudación de las votaciones en el fin de semana del 22 y 23 de diciembre, EU hacía pública su intención de no participar en las primarias al considerarlas un proceso "adulterado" por parte de la dirección del partido instrumental. Días después y con la victoria de la lista de Luís Villares, la organización federalista tachaba de "ilegítimo" el Consello das Mareas por haber sido electo en un proceso "irregular".