La Consellería do Medio Rural pondrá en marcha este año una fórmula innovadora para dotar de tierras de cultivo a empresarios, ganaderos y agricultores que carecen de base territorial en la que poder desarrollar sus proyectos o actividades. Creará los llamados polígonos agroforestales para recuperar suelo productivo sin usar y ponerlo luego a disposición, en una unidad de grandes dimensiones, de las personas que quieran trabajar y vivir del sector forestal y el agroganadero. La previsión es movilizar 10.000 hectáreas distribuidos entre doce o quince polígonos repartidos entre las cuatro provincias.

"Es un proyecto ambicioso, pero creemos que el rural gallego se merece esta ambición", valora el conselleiro de Medio Rural, José González.

Esta medida se recogerá en la nueva ley que está redactando el PP para recuperar tierras productivas y que se espera que pueda quedar aprobada este año. "Busca trabajar contra el abandono del campo y potenciar figuras como los polígono agroforestales para que ningún empresario, ganadero o agricultor que esté en el rural deje de tener su explotación por falta de base territorial", explica en el conselleiro.

La principal novedad radica en que estas tierras movilizadas estarán agrupadas, de forma que bajo un mismo perímetro de grandes dimensiones puedan convivir diversa explotaciones. Es como repartirse un polígono industrial entre distintas empresas, solo que en este caso la superficie a distribuir es mucho mayor, de la misma manera que la unidad mínima de tierra a repartir sea lo suficientemente extensa para garantizar la rentabilidad de la actividad que en ella se realice.

"Pretendemos que convivan empresarios, agricultores y ganaderos bajo un mismo perímetro grande en el que todo esté trabajado. Queremos una simbiosis entre empresarios y productores y que cada explotación tenga una superficie mínima rentable porque uno de los problemas del rural es que la gente no tiene tierra suficiente para obtener esa rentabilidad", precisa José González.

Los polígonos agroforestales se harán a demanda de empresarios y agricultores, pero la Xunta advierte que se tomarán medidas específicas para evitar que las tierras acaben en unas pocas manos. "No queremos que se acaparen las tierras por unos cuantos, sino que se extienda al mayor número posible de agricultores y ganaderos", indica el titular de Medio Rural.

En cuanto se apruebe la ley este año, se empezarán con los proyectos pilotos de recuperación de tierras productivas, "con entre doce y quince" polígonos agroforestales en las cuatro provincias gallegas y donde más base territorial se demande.

El conselleiro reconoce que hay una parte importante de tierra agraria en Galicia en estado de abandono, pero que el problema para su recuperación no es tanto de voluntad política como de la estructura de la propiedad. En Galicia hay 11 millones de parcelas rústicas con 1,6 millones de propietarios. Solo en la provincia de Ourense hay más fincas rústicas que en toda Andalucía y la mayor parte de Extremadura juntas. Y al ser tan pequeñas las dimensiones de las tierras, apenas dan rentabilidad o directamente no dan ninguna, por lo que se acaban abandonando en un número importante.