Ya no es necesario acudir al centro de salud para pedir una cita, pero tampoco para consultar algún dato del expediente sanitario. Al menos, no para los ciudadanos registrados en la plataforma del Sergas É-Saúde, que permite, cuando se accede a sus servicios con la máxima seguridad, a través del DNI electrónico o del sistema de relación con la Administración pública Chave365, llegar hasta los datos más privados del historial médico, incluidos informes sanitarios, resultados de analíticas o tratamiento farmacológico del usuario. Incluso, desde el lunes pasado, podrán acceder a radiologías, resonancias o TACs. En Galicia son ya más de 61.000 personas las que pueden hacer uso de este tipo de servicios, aunque de entrada los documentos que pueden consultar son posteriores a 2010, cuando se implantó la digitalización.
El dato, 61.408 ciudadanos con cuenta en É-Saúde con seguridad alta a mediados de noviembre, confirma la tendencia al alza que se da desde que se instauró la posibilidad de acceder a historial médico, citas o tratamientos desde el móvil, en septiembre de 2015. En el último año y medio, la cifra de usuarios se ha triplicado, aunque no crece en la misma proporción el denominado acceso delegado, que permite llegar a los datos a terceras personas autorizadas diferentes al propio paciente y que pretende facilitar, por ejemplo, estar al día del expediente médico a familiares o cuidadores de dependientes o mayores desbordados por las nuevas tecnologías y a progenitores que cuidan de hijos pequeños.
Desde marzo del pasado año se instauró la posibilidad de disponer de una autorización para poder acceder a expedientes por parte de una tercera persona, pensando en padres o tutores legales, en el caso de los menores de edad o personas incapacitadas, y en cuidadores o familiares de personas mayores que por cuestiones de edad o de enfermedad tengan "limitaciones" para la gestión telemática de los procesos asistenciales. No obstante, ni en uno ni en otro colectivo ha calado todavía en exceso la posibilidad, y es que según el Sergas solo se han registrado hasta ahora 540 solicitudes de acceso delegado, aunque Sanidade no explicita cuántas son para menores de edad. Sí ocurrió que en los primeros días de funcionamiento, las solicitudes debido a hijos fueron la mayoría.
En relación a este grupo, hay que tener en cuenta que en la comunidad existen, según el último padrón del Instituto Galego de Estatística, más de 300.000 niños que aún no han cumplido los 14 años y cuyos padres, por tanto, no precisan de su permiso para gestionar su expediente, pero sí autorización de la Xunta. A esa edad, caducaría el proceso autorizado por el Sergas para acceder al historial médico infantil. Luego los adolescentes tienen que dar su consentimiento para que sus progenitores puedan supervisar sus datos médicos.
En todo caso, según explicó en la presentación de este nuevo servicio su coordinadora, la exconselleira de Sanidade Pilar Farjas, el acceso delegado se habilitó en respuesta a una petición de las asociaciones de pacientes y porque "un 30% de los usuarios" de los servicios sanitarios en Galicia "o son menores o son pacientes que tienen dificultades para gestionar el acceso", por su edad o su dependencia.
Pero si gracias a la plataforma, que puede consultarse a través de dispositivos móviles, un paciente puede hacer un seguimiento de las pruebas que le fueron practicadas o cuándo debería acercarse por la botica para reponer un fármaco, É-Saúde funciona también a niveles públicos para aportar información contrastada por profesionales médicos sobre temas sanitarios. Los gallegos son los segundos en el Estado que más información buscan sobre salud en internet.
