No hay nada que detenga el declive poblacional de Galicia. Ni la entrada de extranjeros tras el final de la crisis amortigua el invierno demográfico al que se dirige la comunidad. Hace una semana, el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó las cifras de población hasta mediados de este año y mostraron que por primera vez en 22 años la población gallega había bajado de los 2,7 millones de habitantes. Con todos los datos, el Instituto Galego de Estatística (IGE) ha realizado una proyección de cómo será la población de la comunidad dentro de 15 años y la radiografía que ha dibujado no es nada positiva. El principal dato es que habrá menos niños y más ancianos en 2033. En el caso de los primeros habrá un 25% menos. Y en el de los segundos, un 51% más. Unas cifras casi insostenibles para mantener el equilibrio generacional.
Habrá menos niños y más mayores, y también más personas solas. La proyección del IGE muestra que 7.000 personas más vivirán solas en Galicia en 15 años, hasta situar el total en 243.545. Casi el 10% de los habitantes que habrá en ese momento en la comunidad.
Menos niños, más mayores, más personas solas y menos población. El IGE fija en 2.565.194 personas la población gallega en 2033, un 5,1% menos que en 2018, repartidos entre el más de un millón de A Coruña (1.073.931), algo menos de un millón en Pontevedra (905.571), poco más de 300.000 en Lugo (304.240) y menos de esa cifra en Ourense (281.452). En total serán 138.096 personas menos que ahora. Es como perdiese casi la mitad de la población de Vigo. O la población de Miñor (Baiona, Gondomar y Nigrán) y O Morrazo (Cangas, Moaña, Bueu y Marín) juntos.
De aquí a 2033, el área de Vigo será en la provincia de Pontevedra la que menos población pierda. Un 1,5% menos con 6.318 habitantes menos. El mayor descenso se producirá en Pontevedra nororiental, en la zona del Deza y Tabeirós-Terra de Montes, con un 10,4% de vecinos menos (-6.984).
El área de Pontevedra Sur (Baixo Miño, Condado y Paradanta) también sufrirán un fuerte retroceso con una caída del censo del 8,7%. El tercer peor resultado lo registrará o Morrazo con un 7,9% menos. Pontevedra y Caldas-O Salnés descenderán un 2,3 y un 2,6%, respectivamente. Solo habrá dos comarcas en Galicia que de aquí a 2030 lograrán mantener su nivel de residentes: Santiago y A Coruña.
En cuanto a la evolución de los hogares, crecerán hasta el año 2023, pero después bajarán y lo harán más, ya que hasta 2033, el número registrará una caída del 0,7%.
Junto al incremento de hogares con un único habitante, el IGE también estima un aumento del número de hogares de mayor tamaño (seis o más personas), que será del 3,8% según sus previsiones.
Habrá también más hogares con parejas sin hijos, al pasar en 15 años de 229.211 a 240.463. Disminuirán, por el contrario, los hogares con parejas con hijos, de 358.470 a 337.357 y también las unidades monoparentales, de 100.375 a 98.590. Destaca, también, el incremento del número de hogares en A Coruña y Pontevedra (8.684 más), pese a que estas provincias perderán 82.909 personas.
En 2033, Galicia contará con solo 157.200 niños de entre 0 y 9 años, un 26% menos que ahora. La población mayor (a partir de 70 años), en cambio, se incrementará un 51% y casi se multiplicarán por cuatro los centenarios.
Los niños menores de 9 años serán el segundo grupo menos numeroso. Solo tendrán menos población los que pasen de 100 años. Los de 10 a 19 años bajarán también casi un 8%, hasta los 199.000. La mayor caída se producirá en el tramo entre 30 y 39 años, más de un tercio. Esta franja de edad es fundamental para sostener el relevo de habitantes porque la edad media a la que en Galicia se tiene el primer hijo son los 31 años. Es, además, un colectivo muy importante para la economía porque es la etapa de consolidación laboral y donde se centran las tasas de consumo más altas. Entre los 40 y los 49 años, el descenso en 2033 también será muy relevante: un 33%. Según se aumenta la edad, el panorama cambia y en 15 años todos los tramos de edades crecerán en número con respecto a los actuales: entre los 50 y 59 años (7,5%), que será el grupo mayoritario (422.900); 60-69 (19%), 70-79 (24%); 80-89 (9%), 90-99 (49%) y los centenarios, casi 4.200 (274% más).
