Enero de 2019. Después de tres años de continuos aplazamientos, el Gobierno central ya tiene listo el real decreto de jubilación anticipada de los policías locales que entrará en vigor en menos de un mes. Se trata de una vieja reivindicación de los sindicatos policiales que equiparará a los agentes municipales con los guardias civiles, policías nacionales y bomberos, que ya pueden retirarse si cumplidos los 59 años han prestado al menos 35 años de servicio.

En el caso de Galicia, de los casi 2.500 efectivos en activo en torno al 10% podrán acogerse el próximo año al reunir los requisitos exigidos para poder colgar el uniforme antes de cumplir los 65 años, según estimaciones de la Asociación de Xefes de Corpo e Mandos de Policía Local de Galicia (Axempol) y CSIF. Ambos colectivos destacan las mejoras que supondrá la jubilación anticipada de los agentes municipales, ya que permitirá rejuvenecer la plantilla y, en consecuencia, prestar un mejor servicio a los ciudadanos.

El raquitismo de las unidades policiales en los ayuntamientos, agravado durante los años de crisis por la congelación de oposiciones, ha contribuido al envejecimiento de la plantilla en España, y en Galicia de manera especial. De los casi 70.000 agentes locales que hay en el conjunto del país, más de 3.200 superan los 60 años y unos 4.500 tienen entre 55 y 60. En el caso de Galicia, de los casi 2.500 efectivos de Policía Local en activo unos 450 están ya en edad de acceder a la jubilación anticipada, pero los requisitos que fija el real decreto, que será presentado hoy por el presidente de la Federación Española de Municipios de Provincias (FEMP) y alcalde de Vigo, Abel Caballero, y el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, limitarán a un 10% de la plantilla la posibilidad de jubilarse anticipadamente.

"Se ha hecho muy tarde (esta reforma), somos los últimos de Europa. Si se hubiera hecho hace años permitiría al resto de la plantilla una planificación más ordenada y tendría un menor impacto en las unidades más mermadas", reconoce el responsable de CSIF-Galicia para la Coordinación de Policía Local, Manuel Aceña. Los beneficios, según augura, se verán "muy rápido" con el rejuvenecimiento de la plantilla y la mejora del servicio. "En dos o tres años, la situación estará normalizada", apunta Aceña.

En la misma línea, el secretario de Axempol en Galicia, el inspector principal de la Policía Local de A Coruña José Manuel Rico, apunta que si esta reforma se hubiera hecho cuando la reclamaron los empleados públicos "habría una planificación más exhaustiva y el impacto sería menor al hacerse una adaptación progresiva".

A la jubilación anticipada para los policías locales, que entrará en vigor el próximo 2 de enero, se sumarán las convocatorias de nuevas plazas (la diseñada por la Xunta, con 38 plazas, las planificadas por los propios ayuntamientos y otro proceso extraordinarios ya previsto), lo que permitirá cubrir plazas vacantes entre principios y mediados de 2020.