El Debate del Estado de la Autonomía ha finalizado con pocos acuerdos por consenso total, vinculados a la aplicación de la ley de bienestar animal, la reforma de la PAC o la ley Paz Andrade, que pone el acento en prestar atención al ámbito de la lusofonía, una normativa aprobada por unanimidad en el Parlamento gallego hace cuatro años que el BNG recuperó para reclamar que sea desarrollada "de manera real y efectiva". En total, recibieron el visto bueno de la Cámara 54 propuestas de resolución,una votada dos veces, por lo que serían 53, y solo ocho de ellas consiguieron el concurso de todos los asistentes al plenario que finalmente votaron, un total de 73, y tres de ellas son transaccionadas entre el PP y los socialistas o En Marea.

Así ocurrió en el caso de la propuesta del PSdeG sobre medio ambiente, relativa a la gestión de parques naturales y la necesidad de abordar una modificación de la normativa sobre residuos, y también con la que defendía el mismo grupo sobre elevar el peso de la vivienda de promoción pública. El consenso con En Marea de los populares se produjo en relación a la Lei de Benestar Animal, que impelen a lograr también que la normativa sea "realmente efectiva".

Además del concurso de todos los parlamentarios en la Ley Paz Andrade, el BNG logró el aval general en la reforma de la PAC, al abogar por que la Xunta defienda los intereses agroganaderos de la comunidad ante un cambio normativo y que su presupuesto se mantenga en los niveles actuales en términos reales. En Marea también consiguió el aval unánime con tres propuestas: sobre el lindano (limpieza y remedación de las zonas afectadas), la estrategia cultural gallega (y una apuesta por que sea transparente y participativa de cara a su enfoque por la nueva consellería) y las directrices de ordenación del paisaje, que urgió a aprobar de forma "inmediata" después de reprochar que el trámite para su elaboración arrancase ya hace dos años.

El PSdeG no logró recabar los apoyos de todos los grupos para las resoluciones que no negoció, mientras el PPdeG tuvo que sacar adelante en solitario más de una veintena de propuestas. Entre ellas la relativa a O Marisquiño, la relacionada con la colaboración para exhumar a víctimas de la Guerra Civil y de la represión franquista y la relativa a la condena de abusos de la inmunidad de los parlamentarios.

Precisamente esta mañana, justo antes de votar, se producía un rifirrafe entre el viceportavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, quien ayer ponía en el punto de mira a Luís Villares, portavoz de En Marea, al explicar la anterior propuesta, con el parlamentario de En Marea cuando una sentencia del Tribunal Supremo que, según Efe, versa sobre el concurso eólico realizado por la Xunta en 2010 sacada a relucir por Tellado provocó que Villares pidiese la palabra por alusiones a Miguel Santalices, presidente de la Cámara, y demandandase la retirada de las afirmaciones. En caso de no hacerlo Tellado, pidió que fuera el propio Santalices quien lo hiciera.

En concreto, Tellado explicó que una sentencia del Supremo "anula el 95% de un fallo dictado por el TSXG en el que participaba Luís Villares."Usted dictó una sentencia contra la Xunta", dijo "cuando ya hacía meses que estaba negociando su candidatura..." "Usted no es un digno representante de la ciudadanía gallega, pero tampoco es digno de seguir impartiendo justicia, ni desde el escaño ni desde los tribunales de justicia", señaló Tellado, lo que provocó la petición de Villares, quien señaló que "decir que fue por razones políticas y no por razones jurídicas" es "una incorrección que supone una acusación gravísima", no solo contra él, sino también "contra la dignidad y función jurisdiccional del TSXG". Además lo acusó de "faltar a la verdad" cuando dijo que es "totalmente revocatoria". Villares reclamaba la retirada del diario de la Cámara. Se generó una enorme protesta y el presidente de la Cámara instó "a votar". "Si no está de acuerdo, puede dirigir un escrito", apuntó Santalices.