Un año después de la oleada de incendios que arrasó los montes gallegos, con especial incidencia en el sur de la provincia de Pontevedra donde se cobró la vida de dos mujeres en Chandebrito y un vecino de Vigo, ayer se desató un fuego descontrolado en Mondariz que al filo de las 13 horas ha sido controlado. A primera hora de esta mañana (7.45h) aún permanecía activo pero estabilizado. El fuego, que ha quemado 150 hectáreas de monte en Mondariz, puso en riesgo anoche las viviendas de los núcleos de O Barro, Barral y Boente. Muchos vecinos de O Barro -especialmente los de más edad- fueron evacuados de forma preventiva para evitar las intoxicaciones por humo, mientras se seguía la evolución de las llamas ante la posibilidad de tener que desalojar las otras dos aldeas. Protección Civil los reunía anoche en la iglesia parroquial, donde seguían de cerca la situación. Pasada la medianoche se comunicaba a los vecinos que podían volver a sus casas ya que las llamas no entrañaban peligro para sus viviendas.
El fuego comenzó sobre las 18.17 horas en el monte de eucaliptos que separa las parroquias de Sabaxáns y Gargamala, pero avanzó con tal virulencia y en tan poco tiempo que la Consellería de Medio Rural, ante la cercanía de las llamas a las viviendas, decretó la situación de alerta, dado el riesgo real para la población, y comenzó las evacuaciones. Inicialmente se enviaron al lugar diez helicópteros, que con el ocaso tuvieron que dejar de trabajar.
En la zona trabajaron a lo largo de la noche un técnico, 10 agentes forestales, 32 brigadas, 21 motobombas, cuatro palas y un tractor. Hasta el lugar acudieron también efectivos de la Policía Autonómica, la Guardia Civil y Protección Civil, así como bomberos de distintos parques de la provincia y de Vigo. El conselleiro de Medio Rural, José González Vázquez, también se desplazó a este punto para supervisar las labores de contención del fuego.
La solidaridad también llegó rápidamente en forma de voluntarios. Numerosos vecinos de otras parroquias de Mondariz y municipios adyacentes acudieron para luchar contra el fuego. "Primero llegó el humo, y en pocos minutos ya vimos las llamas. Se desplazó muy rápido", explicaba una de las vecinas.
La intensa humareda se hizo pronto visible desde distintos puntos del sur de la provincia de Pontevedra y pasadas las ocho de la tarde el humo oscureció completamente el cielo de la ría de Vigo. Vecinos de Valença, en Portugal, también fueron testigos del humo.
La noche se anticipaba dura, especialmente para los vecinos de O Barro, Barral y Boente, unos núcleos de mucha vivienda pero poca población, pues muchas casas son segundas residencias. En O Barro residen de forma habitual un centenar de vecinos.
"Estamos evacuando por precaución a las personas mayores para evitar intoxicaciones por el humo y se ha habilitado la iglesia como punto de encuentro, lo que también permitirá controlar si todos los vecinos están bien. Hay muchos ancianos que viven solos y en estas fechas tienen paja en casa, con el peligro que ello supone ante las pavesas que cruzan de un lado a otro la carretera", explicaba la teniente de alcalde Mónica Peralba.
Recorremos la zona cero del incendio de Mondariz. // M. CLAVERO
El regidor, Xosé Carlos Montes, junto a la teniente de alcalde Mónica Peralba confirmaron que, una vez el fuego comenzó a acercarse peligrosamente a las casas, contaban con medios humanos y materiales "suficientes" si bien reconocen que se reaccionó "tarde" . "Nosotros avisamos y en un primer momento solo se mandó un helicóptero de control. Se actuó tarde con los medios aéreos, si se hubiera enviado ayuda antes se podría haber evitado que el fuego se aproximase a las viviendas", lamentaba la concejala del Ayuntamiento de Mondariz, en referencia a la ausencia de hidroaviones.
Por su parte, el conselleiro de Medio Rural, José González, aseveró que se han puesto a disposición del municipio "todos los medios" y se pudo evitar "la afectación del fuego a las casas". "El viento fue el gran protagonista; por el momento no hay previsión de más desalojos", reconocía González, que admitía que se enviaron a la zona diez aviones y que "por motivos climatológicos" tuvieron que cesar su actividad.
De momento no ha transcendido el origen del fuego, si bien serán los investigadores de la Guardia Civil quienes determinen sus causas, si fue o no provocado.
Octubre ha vuelto a convertirse en un mes negro para los montes gallegos. En apenas siete días se han quemado en torno a 500 hectáreas de terreno.En apenas siete días se han quemado en torno a 500 hectáreas de terreno Este no es el primer gran incendio que sufre el municipio de Mondariz. Hace seis años sufrió un fuego intencionado con hasta 17 focos distintos que arrasó más de 170 hectáreas.
