La inversión ejecutada en Galicia en el tren de alta velocidad ascendía al pasado 30 de junio al 26,6%. De los 461,5 millones de euros previstos para este año en los presupuestos del Estado, en los seis primeros meses solo se habían gastado 122,9 millones, según los datos facilitados ayer por el Ministerio de Hacienda. En todo caso, el ritmo de las obras se ha acelerado con respecto a los dos pasados ejercicios, ya que en diciembre de 2016 no se llegó siquiera al 30% de lo previsto y en junio del pasado año -con datos provisionales todavía- era solo de un 14%. Los tres años han resultado ser singulares en la política, con dos elecciones generales en seis meses, casi un año con el Gobierno en funciones, una moción de censura que triunfó y demoras en la aprobación de los presupuestos del Estado que afectaron a la marcha, de un modo o de otro, de las obras del AVE en la comunidad autónoma.

La realidad dicta que en obra pública es muy complicado ejecutar dentro del año e incluso ya aproximarse a las cifras iniciales de inversión que marcan los presupuestos. Lo normal es quedarse siempre por debajo del 80%, si bien en 2016 y en 2017 ese porcentaje estuvo aún mucho más lejos, circunstancia a la que contribuyó la inestabilidad política en el Gobierno central.

En el actual ejercicio el ritmo de obra terminada y entregada del AVE gallego se ha acelerado y, salvo en el mes de junio -la moción de censura triunfó en los primeros días-, la responsabilidad es del Gobierno del PP. Los presupuestos cuentan con 461,5 millones de euros para la alta velocidad en Galicia, de los que 406 son para la línea Lubián-Ourense (la que comunicará con Madrid a partir de 2019) y el resto, algo más de 51, para el Eje Atlántico Vigo-A Coruña, destinados a finalizar la instalación del sistema de seguridad avanzado ERTMS en todo el corredor y reformar la estaciones de tren de Santiago y A Coruña.

Pese al retraso en la aprobación de los presupuestos para este año -en el mes de junio-, el ritmo de ejecución de las inversiones es el más alto en tres años. Ha alcanzado casi el 27% en el primer semestre. Se pagaron 122,9 millones de euros por las obras terminadas, si bien no se indica por parte del Ministerio de Hacienda qué parte corresponde al Eje Atlántico y cuál al tramo Lubián-Ourense de la alta velocidad.

En todo caso, la previsión del Ministerio de Fomento y confirmada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, es acabar las obras del AVE gallego en el último trimestre del próximo año, para a continuación iniciar la fase de pruebas de la línea y, en una fecha posterior pendiente de concretar, emprender la explotación comercial.

El ritmo de ejecución de las obras con respecto a la actividad presupuestada es muy superior al registrado el pasado año. A 30 de junio de 2017 -no hay datos del cierre del ejercicio-, la inversión ejecutada era tan solo del 13,9%. De los 481 millones previstos para todo 2017 solo se he habían pagado a las empresas del AVE 66,9 millones de euros.

La culpa de este bajo nivel de ejecución fueron los 17 tramos que estaban bloqueados por diferencias entre Fomento y las empresas adjudicatarias. Fue el entonces ministro de Fomento Íñigo de la Serna quien desveló los problemas, que achacó a la imposibilidad del Gobierno en funciones -entre diciembre de 2015 y octubre de 2016- de poder tomar decisiones por su carácter provisional.

Los contratos, que afectaban a los tramos entre Zamora y Ourense y no solo a los ubicados en Galicia, se desbloquearon en abril del pasado año, lo que ralentizó el ritmo de ejecución de las obras de todo ese ejercicio. A ello se sumó que los presupuestos del Estado también se aprobaron en junio.

El año 2016 tampoco fue bueno para las obras del AVE, debido fundamentalmente a que durante casi todo el ejercicio el Gobierno estuvo ejerciendo en funciones y, según argumentaron en su momento, tenía una capacidad legal muy limitada para afrontar los problemas que surgían con las empresas a la hora de afrontar las obras. El caso es que había presupuestados 802 millones de euros y a 30 de junio se habían gastado 107 millones (el 13,4% del total). Al cierre del ejercicio se ejecutaron 230 millones, el 28,7%.

La inversión total para el AVE gallego es de 4.400 millones de euros y a principios de este año la ejecución global, según los datos del Ministerio de Fomento, era de 3.405 millones, por lo quedaba aún por destinar al tren de alta velocidad gallego, y gastar en las obras. 1.000 millones más.