El Partido Popular y En Marea se aliaron ayer en el Congreso para exigir la condonación de 200 millones al puerto de Langosteira, y despacharon las reivindicaciones de los demás puertos gallegos con una genérica declaración para que el Estado "ejecute infraestructuras de interés general necesarias para su operatividad, conectividad y competitividad".

La proposición no de ley, aprobada en la comisión de Fomento del Congreso de los Diputados, con los votos de PP, Unidos Podemos, grupo al que pertenece En Marea, y Foro Asturiano, no cita expresamente ni el puerto de Vigo, ni el de Marín, ni el de Vilagarcía de Arousa, ni el de Ferrol y San Cibrao, los otros puertos de interés general de la comunidad. La iniciativa, que tuvo el voto en contra de PSOE y Compromís, solo les dedica, sin nombrarlos, nueve líneas, en las que se pide que tras la condonación al puerto de Valencia de 350 millones se compense a los terminales gallegos sin deuda con inversiones.

El gran protagonista de la iniciativa que ayer salió adelante era Langosteira. Treinta y una líneas para explicitar la batería de demandas al Gobierno de Pedro Sánchez para el terminal coruñés.

PP y En Marea justifican centrar la atención y la mayoría de las demandas en el puerto coruñés por su "especial relevancia", y la importancia se debe a su delicada situación económica. Tiene una deuda de 300 millones, de los cuales 200 millones son de un crédito estatal. Por ello, piden al Ejecutivo central "condonar el préstamo o conceder ayudas económicas equivalentes o adoptar las medidas conducentes a la amortización efectiva y global de dicho préstamo".

Además solicitan renegociar el convenio de 2014, por el cual debían venderse los terrenos del puerto en el centro de A Coruña para costear Langosteira. Quieren que los espacios pasen a ser públicos.

También exigen crear un consorcio público para gestionar Langosteira, y en el que deberían participar Fomento, Puertos del Estado, Autoridad Portuaria, ADIF, Ayuntamiento de A Coruña y Xunta. Y por último, demandan "impulsar y financiar la ejecución de la conexión ferroviaria" de Langosteira, incluyendo ya fondos en los presupuestos del año que viene. El objetivo es que se pueda licitar "en el primer semestre de 2019". El coste estimado de este enlace es de 140 millones.

La iniciativa corrió a cargo del PP, que presentó una iniciativa, que luego mudó en su redacción para lograr el apoyo de Unidos Podemos, y así conseguir su aprobación. La proposión no de ley original sí mencionaba a Vigo y los demás puertos de interés general, y en el caso olívico, pedía "atender las necesidades de financiación del acceso ferroviario a la terminal ro-ro de Vigo". La primera redacción citaba a todos los puertos, pero En Marea, que gobierna en A Coruña, quería explicitar su compromiso con la ciudad, e introdujo cambios, con el beneplácito del PP.

El resultado fue que Langosteira se convirtió en la gran protagonista de la iniciativa, y los demás puertos fueron minimizados, hasta el punto de que no se les cita ni por el nombre.

Antes de llegar a un acuerdo, la diputada viguesa de En Marea Alexandra Fernández fue muy crítica con el PP. Aseguró que "el viraje del Partido Popular", al exigir ahora la condonación que no reclamó antes al Gobierno de Rajoy, en alusión a la cercanía de las elecciones municipales de mayo. Fernández acusó a PP y PSOE de haber "impulsado un modelo que ha priorizado los puertos del Mediterráneo y del sur, frente al abandono de los del Noroeste".

Por su parte, el diputado coruñés Miguel Lorenzo, del PP, exigió "igualdad de trato" para los puertos gallegos, en particular para Langosteira, después de la condonación a la terminal valenciana. Para Lorenzo, los 350 millones a Valencia son el peaje a pagar por Pedro Sánchez para gobernar a cambio del apoyo de Compromís.

Los socialistas, en contra

¿Y cómo justificó el PSOE su voto en contra, cuando en Galicia los socialistas han solicitado en el Parlamento autonómico compensaciones para los puertos gallegos, tras la condonación a Valencia? Le tocó al diputado coruñés Ricardo Antonio García, y denunció que el Gobierno de Rajoy dejó sin ejecutar hasta 2.000 millones de euros comprometidos con Galicia. García lamentó la "deshonesta" forma de hacer política del PP.

El portavoz del PNV en la Comisión, Íñigo Barandiaran, criticó la iniciativa del PP, pues defiende que cada puerto se financie en función de su rendimiento y rentabilidad, y censuró la condonación al puerto valenciano por "alterar la competencia". "Las condonaciones son decisiones arbitrarias",sentenció.

Por su parte, el diputado de Ciudadanos, Luis Salvador, que intervino, pero luego no votó, manifestó su sorpresa porque el PP critique la condonación en Valencia, pero luego pida lo mismo para Galicia.

"No entiendo que esto sea una comisión para estas bromas. Primero denunciar, pero luego reparto de cromos", aseveró.

El portavoz de Compromís en el Congreso, el valenciano Joan Baldoví, aprovechó su intervención en otra iniciativa para justificar el perdón del crédito valenciano, pues el préstamo sirvió para organizar "un gran evento" como fue la Copa de América de Vela.