Los concellos que albergan zonas con riesgo de inundación están obligados a aprobar planes de actuación para proteger las áreas más vulnerables, alertar a la población y coordinarse con la Administración autonómica o la estatal para paliar los efectos y corregir las causas. Sin embargo, hay todavía 22 ayuntamientos que carecen de estos planes. Y eso que en junio de 2016 la Xunta instó a 33 municipios a impulsar esta medida de protección para reducir las consecuencias de eventuales desbordamientos de los ríos.

Este año homologaron sus respectivos planes Riotorto, A Pontenova, O Grove y Coirós y lo tienen en tramitación As Pontes, A Rúa y Monterrei, cuyo visto bueno final corresponde a la Comisión Galega de Protección Civil. En la provincia de Pontevedra están pendientes de a aprobarlo Pontecesures, Valga, Catoira, Cambados, Vilanova de Arousa, Pontevedra, Baiona, Vilagarcía, Cangas y Sanxenxo.