El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, aseguró ayer que la derecha representa el "peor escenario" para las ciudades gallegas y puso en valor el trabajo realizado por los gobiernos del PSOE, como el caso de la ciudad Lugo con Lara Méndez. El jefe de filas de los socialistas gallegos se pronunció de este modo tras la reunión de la ejecutiva gallega, que ayer mantuvo el primer encuentro del curso político en la ciudad de la muralla.

En este escenario, Caballero puso como ejemplo del "desastre de las políticas del PP" a la ciudad de Ourense, con un gobierno municipal "que en cuatro años no tiene aprobados ni unos solos presupuestos". "Por tanto, nadie de la derecha en Galicia tiene legitimidad a la hora de hacer propuestas urbanas en los escenarios más dinámicos", reprochó.

Además, se refirió a la presentación del candidato del PP a la alcaldía de Lugo, Ramón Carballo. "Le quiero decir a Feijóo que, cuando dice que su primera opción es Carballo, la primera opción de los ciudadanos es Lara Méndez, un gobierno socialista", indicó.

En su intervención, afeó las promesas incumplidas del PP con Lugo, como la falta de un servicio de hemodinámica "las 24 horas" en el Hospital de Lugo. Todo ello en una comparecencia en la que volvió a poner en valor que el Parlamento de Galicia, a iniciativa de los grupos de la oposición, vaya a investigar los recortes en la sanidad pública y sus efectos en la asistencia a los ciudadanos tras la muerte de un hombre a principios de agosto sin atención médica en el PAC de A Estrada.

Antes de celebrar su reunión, la dirección del PSdeG realizó un paseo por la ciudad en el que participó el secretario provincial, Álvaro Santos, quien esta misma semana trasladó al PSdeG, a través de una carta, su malestar por la convocatoria de ayer toda vez que ya tenía confirmada su presencia en otro acto del partido en A Fonsagrada (Lugo). Santos estuvo con Caballero durante el paseo, pero no asistió a la reunión de la ejecutiva autonómica, de la que es miembro.

Preguntado por los periodistas al respecto, el secretario xeral del PSdeG declinó hablar de enfrentamientos y aseguró que "el partido está a tope" para "retirar a Feijóo y a los gobiernos de la derecha allí donde están".