Seaga cobrará 350 euros por hectárea que limpie en las franjas de seguridad. Los dueños de fincas que así lo deseen podrán encargar a la empresa pública esta labor. En el caso de parcelas con propietario desconocido, si el coste de la limpieza supera el valor catastral de la finca, ésta pasará a ser "propiedad del Banco de Terras", anunció ayer el presidente de la Xunta. Si los dueños no limpian las franjas de seguridad, Seaga podrá entrar y hacerlo y luego remitirle la factura.

Seaga se hará cargo del "sistema público de gestión de franjas secundarias" para prevenir contra los incendios forestales que, según el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, se crea mediante el convenio de colaboración entre Xunta, Fegamp y esta empresa pública.

Según ha avanzado Feijóo en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, este sistema echará a andar "en los próximos días" o "en las próximas semanas", por los ayuntamientos determinados como "prioridad 1" por el riesgo de fuegos.

La Fegamp, por su parte, aprobó el documento en una cita extraordinaria celebrada esta semana, con lo que tras su paso por la reunión semanal del Gobierno gallego, ahora la adscripción será voluntaria.

La rúbrica de este convenio forma parte de los compromisos adquiridos después de la ola de incendios del pasado octubre, por la que murieron cuatro personas y ardieron unas 50.000 hectáreas. Legalmente, el Gobierno gallego estableció el 31 de mayo de cada año para que estas franjas estuvieran limpias.

10 MILLONES AL AÑO

Lo que ha autorizado la reunión semanal del Gobierno gallego es que la Consellería de Medio Rural firme un convenio con la Fegamp para "la gestión de la biomasa" en estas franjas de seguridad, cerca de núcleos de población.

El acuerdo, según la Administración autonómica, que invertirá 28 millones de euros, permitirá actuar durante cuatro años en unas 16.000 hectáreas. La Fegamp pondrá 2,5 millones con cargo al fondo de cooperación local, con lo cual, según los datos aportados por Feijóo, serán 10 millones cada año.

Los trabajos se enfocarán tanto en los terrenos abandonados como en aquellos de particulares que se adhieran a un contrato de gestión de biomasa, que abonarán una tarifa uniforme fijada por hectárea de 350 euros. En el caso de dueño desconocido, si el coste de limpieza supera el valor catastral, "se convierte en propiedad del Banco de Terras", ha indicado Feijóo.

"Vamos a intentar sustituir a los ayuntamientos que no quieran o no puedan hacerlo y a quien no encuentre quién lo haga por Seaga o contratos de Seaga con empresas que se dedican a este fin", ha expuesto el presidente gallego.

Para facilitar estas tareas, además, la Xunta pondrá en marcha un visor web de acceso público que contendrá las franjas secundarias en aquellos ayuntamientos con planes generales de ordenación municipal adaptados a la ley de ordenación urbanística.