Marea Atlántica ha aprobado sumarse a la propuesta lanzada desde Compostela Aberta (CA) para iniciar un proceso de reconfiguración de En Marea para darle un nuevo giro y "reforzar el espacio de confluencia". Las formaciones municipalistas, encabezadas por las de Santiago, A Coruña y Ferrol, mantienen abiertas y claras diferencias con la dirección del partido instrumental, liderado por el diputado Luís Villares.

El alcalde de A Coruña y líder de la Marea Atlántica, Xulio Ferreiro, informó ayer de que A Rede, el máximo órgano de decisión de la formación rupturista en la ciudad herculina, mantuvo una reunión en la que aprobó "ese pronunciamiento a favor del diálogo", con lo que dan su visto bueno a la propuesta de CA. "Si hay una propuesta de diálogo encima de la mesa; nosotros siempre estuvimos por construir y por intentar reforzar el espacio de confluencia. Por tanto, no nos vamos a negar a ninguna llamada que vaya en el marco del diálogo", indicó Ferreiro.

En su momento, el líder de la Marea Atlántica emplazó a la dirección de esta formación para posicionarse sobre la propuesta de CA para renovar En Marea. Una propuesta que desde un principio Ferreiro calificó de "discusión bienintencionada", y que ahora apoya el máximo órgano de la marea herculina.

Así, Compostela Aberta, encabezada por el alcalde de Santiago, Martiño Noriega, propone crear una "mesa de confluencia" con presencia de los partidos que formaron parte de la primera coalición -EU, Podemos y Anova- y las mareas de Santiago, A Coruña y Ferrol. Queda hora por fijar la fecha para celebrar el encuentro.

Además, la propuesta de Compostela Aberta plantea también el adelanto a septiembre de las elecciones al Consello das Mareas, órgano de dirección del partido instrumental, con el fin de "evitar la precampaña electoral" de las elecciones municipales del próximo año.

Por su parte, la dirección de En Marea ve con buenos ojos la llamada al diálogo efectuada por la marea compostelana pero rechaza la creación de lo que considera una "mesa de notables" que contradice el espíritu de En Marea porque vuelve a posturas "superadas" hace dos años, cuando en su nacimiento se configuró como un partido propio alejado de las mecánicas de "coalición" y en el que las personas participan a título individual y no como representantes de organizaciones.