La dificultad para conseguir plaza en un centro de mayores (se tarda casi dos años) hace recaer el peso de la atención de muchos dependientes en la familia. La Xunta trata de aliviar la carga que soportan los cuidadores no profesionales mediante programas como el de respiro familiar. La Administración se hace cargo temporalmente de la persona enferma para que quien la atiende pueda tomarse unos días de descanso. El pasado año se beneficiaron de esta iniciativa 687 gallegos. Además también ha creado grupos de autoayuda dirigidos a este colectivo y en los que participaron ya un centenar de personas.

El grupo de investigación GRISAMP de la Universidad de Santiago, autor del estudio sobre la carga de los cuidadores, ha ideado también una aplicación para el móvil dirigida a prevenir la depresión en este colectivo. El proyecto ha sido financiado por la Agencia Estatal de Investigación y se negocia ahora firmar convenios con la Xunta y los ayuntamientos. "Hemos habilitado ya un teléfono, el 673528166, y el correo electrónico prevenciondepresion.app@gmail.com donde nuestro equipo atenderá encantado a los cuidadores que quieran más información", explica Vanessa Blanco, del equipo de investigadores.