La elevada demanda de charlas de los colegios obligó al Incibe a buscar alternativas para atender a una comunidad educativa, padres, niños, educadores, ansiosa por aprender. De ahí que en 2016 echara a andar "Cibercooperantes", explica su coordinadora, Ángela García. Las demandas que les llegan de los centros educativos se centran "principalmente en el ciberacoso, la privacidad y en saber hasta dónde llega cómo te comportas en internet y que tengan conocimiento de que no todo vale", explica.

Para esta especialista, la formación es necesaria. Al igual que ocurre con la seguridad vial, que se ha incluido en los currículos, señala, a los niños hay que darles formación y pautas sobre cómo usar la red y a qué se pueden enfrentar. En ese sentido, no vería mal una materia específica. Y los padres, añade, también están necesitados de una orientación para saber cómo actuar ante problemas, mientras los docentes la reclaman cada vez más, al estar "más concienciados".

Ángela García anima a quien lo desee a sumarse a la causa, aunque avisa, eso sí, de que "tienen que saber que van a dar charlas y se van a enfrentar a un público que va a hacer preguntas". Con ese requisito, han respondido al convite desde gente del gremio (informáticos, "telecos" y otros ingenieros) a periodistas o incluso estudiantes: "No tenemos un perfil único ni mayoritario de voluntarios", explica.

Lo que seguro que tienen en común, apunta, es sentirse "reconfortados personalmente" por una labor que "ayuda a hacer un internet más seguro en general" y a los menores, en particular, "para que sepan cómo actuar y no se provoquen problemas a sí mismos".