La escasez de pediatras en Galicia, tanto de los que están en plantilla del Sergas como de sustitutos para cubrir las vacantes, ha forzado a la Consellería de Sanidade a emprender una reestructuración temporal de la atención primaria para garantizar unos servicios mínimos durante el verano que acaba de comenzar. A falta de conocer con detalle la reorganización, la asistencia pediátrica quedará limitada a los centros de salud de referencia de cada comarca -los grandes ambulatorios-, donde se agruparán los médicos especializados en la atención al niño, por lo que un número indeterminado de centros de salud de menor rango, ubicados tanto en el medio rural como en el urbano, perderán la atención pediátrica durante el periodo estival, lo que obligará a los padres a desplazarse fuera de su entorno habitual o a acudir al médico de familia como alternativa.

La modificación del mapa sanitario la anunció ayer el director xeral de Asistencia Sanitaria, Jorge Aboal, en comisión parlamentaria. Aseguró que este cambio, de carácter temporal, está motivado por la falta de sustitutos para cubrir las vacantes que dejen los pediatras durante sus vacaciones. Aboal indicó que era "imposible" reemplazar las ausencias debido a que se trata de una especialidad médica con "paro cero".

No es solo un problema de ámbito rural, sino también urbano, con Vigo como máximo exponente. En julio y agosto las consultas de pediatría de cinco centros de salud de la ciudad (Rosalía de Castro-Beiramar, Coia, Navia, Nicolás Peña y Lavadores) cerrarán de tarde y concentrarán en horario de mañana la atención a los alrededor de 16.000 menores que tienen adscritos. Y en Coruxo, los usuarios temen que se pierda la única plaza de pediatría y que se tengan que desplazar a Navia.

Las dificultades por la falta de pediatras afecta a toda Galicia. La comunidad ya tiene un déficit de 40 de estos especialistas y en los próximo cinco años otros 80 -de una plantilla total de 340 especialistas- llegarán a la edad de jubilación. Una de las soluciones planteadas por Sanidade es aumentar el número de plazas de MIR de pediatría, por lo que se pasará de 20 a 26.

Pero mientras tanto, se impone un reestructuración para afrontar el déficit, que pasa por agrupar a los pediatras en los centros de salud de referencia. Se concentrarán los profesionales que prestan servicios de forma "itinerante" y aquellos con un cupo inferior a los 700 niños. Será la Xunta, a través de las gerencias de cada área sanitaria, la que identificará los centros de salud que cuenten con atención pediátrica y los que no.

Según el director xeral de Sanidade, esta medida permitirá "mejorar el acceso a la atención pediátrica" de las zonas en las que durante el verano no haya sustitutos y "disminuirá la necesidad de acudir a las urgencias hospitalarias y a los puntos de atención continuada".

En cuanto a los centros de salud que se queden sin este servicio, que pueden ser decenas, Jorge Aboal aseguró que en los casos en los que los pacientes tengan "dificultades de desplazamiento" hacia el ambulatorio de referencia, podrán ser atendidos en su centro habitual por médicos de familia.

El director xeral de Asistencia Sanitaria comentó que esta reestructuración, de la que los sindicatos médicos no tiene información, fue "consensuada" con las sociedades científicas de pediatría existentes en Galicia ante un problema generalizado en todo el Estado por la dificultad de contratación de pediatras.