Faltan pediatras en Galicia. Es una de las especialidades con más déficit de facultativos. El 12 por ciento de las plazas están ocupadas por médicos de familia, según un estudio de la Asociación Española de Pediatría en Atención Primaria. Se necesitarían alrededor de 40 doctores para cubrir estas vacantes, pero además el problema se agrava porque uno de cada cuatro pediatras tiene más de 60 años, de manera que en cinco años cumplirán la edad de jubilación. En la comunidad gallega trabajan actualmente en los centros de salud unos 340 profesionales especializados en la atención a niños, de manera que alrededor de unos ochenta podrían jubilarse a partir de 2023, salvo que opten por prolongar su vida laboral hasta los 70 años.

Consciente del problema la Consellería de Sanidade ya ha solicitado al Ministerio la ampliación en seis plazas del número de pediatras en formación MIR al año, con lo que se pasaría de las 20 actuales, que están cubiertas, a 26. La Asociación de Pediatría en Atención Primaria de Galicia asegura, en todo caso, que ésta sería una solución a "largo plazo", que no resuelve la sobrecarga que sufren ahora estos especialistas.

Según el estudio de la Asociación de Pediatría, Ourense es la provincia gallega con menos déficit de pediatras. Solo el 6 por ciento de las plazas están cubiertas por otros especialistas. En Pontevedra el porcentaje de vacantes que son ocupadas por médicos de familia sube al 9 por ciento. Pero la peor situación es la de A Coruña, con un déficit del 14 por ciento, y sobre todo Lugo donde dos de cada diez puestos de pediatría son atendidos por médicos de cabecera.

La situación en Galicia tampoco es tan grave como en otras comunidades como Baleares, donde casi la mitad de los niños no tienen pediatra y son atendidos por el facultativo de familia. En Castilla La Mancha llega al 42 por ciento y en Madrid, Extremadura, Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía y Canarias ronda el 30 por ciento.

Aún así, la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) denuncia que la falta de pediatras en atención primaria está provocando en Galicia que más del 50 por ciento de los facultativos "sufra síndrome de burnout por el estrés y la ansiedad que le produce la sobrecarga de trabajo". Y además alertan de que este déficit de profesionales se va "acumulando año tras año y que a medio plazo se acentuará debido a las jubilaciones".

El 40 por ciento tienen más de 55 años y el 25 por ciento superan los 60 años. Aunque son datos estatales, la Asociación de Pediatría de Galicia considera que son "extrapolables" a la comunidad autónoma.

Entre las medidas que estaba analizando el Sergas con los colegios de médicos para mejorar la Atención Primaria estaba precisamente la de agrupar a los pediatras del rural, que atienden de forma itinerante varias poblaciones, en los centros de salud de las poblaciones de mayor tamaño.

A la Asociación de Pediatría de Galicia no le parece mal esta medida. Reconoce que la solución es compleja y que tampoco pasa por prolongar la vida laboral de los médicos ni por importar médicos extracomunitarios. Abogan por reorganizar las cargas de trabajo y mejorar las condiciones laborales para que los pediatras gallegos "no se vayan a otras comunidades o a la privada".