El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, pidió ayer de nuevo a los sindicatos de justicia que "consideren" la última oferta de la administración -con subidas salariales de entre 105 y 139 euros al mes a alcanzar en 2021- para poner fin a la huelga iniciada el 7 de febrero. El dirigente aseguró que la Xunta sigue "abierta al diálogo", los sindicatos recordaron ayer que quien se levantó de la mesa fue ella y explicaron que esperan ser convocados a un nuevo encuentro.

Rueda, en declaraciones en un acto en Portugal, defendió la necesidad de "dialogar" para hallar una solución. "Nos gustaría que [la oferta de la Xunta] fuese considerada y que se pudiera poner fin a la huelga. Nosotros seguimos abiertos al diálogo para poder cerrarla", expuso, según informa Europa Press. "Nos gustaría que su final llegase cuanto antes", añadió antes de advertir al personal de justicia dependiente de la Xunta -unos 2.600 trabajadores- que "en ningún caso se puede permitir que los ciudadanos sean usados como rehenes". Reiteró su exigencia de respetar los servicios mínimos en "servicios básicos" como la tramitación de certificados de defunción, que los sindicatos no entendían que entraban en esa categoría.

Por su parte, los trabajadores reclamaron de nuevo la dimisión de Rueda y organizaron ayer nuestras protestar reivindicativas, si bien reclaman la llamada por parte del Ejecutivo para "negociar".

Además, el portavoz del comité de huelga en A Coruña, Javier Hernández, pidió centrar la negociación en el complemento autonómico que paga la Xunta y no incluir la subida general a las plantillas públicas anunciadas por el Gobierno central.