Los independentistas catalanes condenados por quemar imágenes del Rey Juan Carlos I -una decisión judicial por la que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha condenado a España- no fueron los únicos. A dos militantes en favor de la independencia de Galicia la Audiencia Nacional también juzgó y multó por prender fuego a una efigie del monarca al término de una manifestación celebrada en Vigo.

Los hechos ocurrieron el 6 de diciembre de 2007, día de la Constitución, al término de una manifestación convocada por el colectivo independentista Causa Galiza, precisamente, en contra de la Carta Magna.

Tras la quema del muñeco tamaño a natural de Juan Carlos, ataviado como capitán general de todos los Ejércitos, fueron detenidas cuatro personas pertenecientes a Nós-Unidade Popular, a las que se les procesó en la Audiencia Nacinal por un delito de injurias a la Corona.

A los cuatro imputados -Alexandre Bolívar Estévez, Santiago Méndez Rodríguez, Christopher Machado Ibáñez y José Carlos Peña Nieto-, el juez Fernando Grande-Marlaska les acusaba de un delito de injurias a la Corona. En su declaración, Alexandre Bolívar exculpó a sus otros tres compañeros y asumió la quema de la imagen del Rey.

Finalmente, en 2009, fueron condenados tanto él como Santiago Méndez a multas de 2.700 y 1.800 euros, respectivamente. A diferencia del caso de los independentistas catalanes, a los gallegos no se les llegó a condenar a penas de cárcel.