Este mediodía Xunta y sindicatos se sentarán de nuevo a la mesa de negociación para intentar desbloquear un conflicto en la Justicia que ya acumula un mes de huelga. El Gobierno gallego, tal como dio a entender ayer su presidente, Alberto Núñez Feijóo, tiene intención de acudir con una nueva oferta económica. El objetivo, quiso dejar claro, es que los trabajadores públicos gallegos ganen más que la media nacional, pero sin desvelar cifra alguna. "La Xunta está dispuesta a buscar una franja salarial por encima de la media pero dentro de la racionalidad", dijo tras el Consello.
Lo que tiene claro es el rechazo rotundo a la reivindicación del comité de huelga de reclamar una subida lineal, ya este año, de 2.700 euros. "No se puede aceptar", comentó. La última propuesta de la Xunta establece un incremento en las nóminas -en el complemento autonómico- de entre 816 y 1.080 euros según categoría y a repartir en dos años. "Dentro de la franja de la racionalidad sí estamos dispuestos a seguir hablando, pero los límites de incrementos salariales cada vez son más estrechos, dado que estamos en un planteamiento muy ambicioso", aclaró.
Feijóo cree que la demanda sindical llevaría a los funcionarios gallegos de Justicia a ser los segundos mejor pagados, por detrás del País Vasco. "No podemos, en ningún caso, competir con el Gobierno vasco pagando porque sería algo que atentaría contra las 90.000 familias que trabajan en la Xunta", precisó.
El presidente recordó además que el Estado está negociando una subida del salario base para todos y que la horquilla oscilará entre el 5,5% y el 8%, lo que sumado al incremento del complemento autonómico de Galicia, el aumento final estaría entre el 10% y el 12%.
Si bien calificó como puramente "salarial" un conflicto que ha provocado la suspensión de miles de juicios, expresó su deseo de que los sindicatos sigan "sin dejarse politizar por los partidos", dado que no aprecia en las formaciones políticas voluntad alguna de que haya acuerdo. Además, pidió que el problema de la Justicia en Galicia no se usase para iniciar un conflicto de ámbito nacional en otras comunidades autónomas, en las que también se reclaman mejoras salariales.
El presidente de la Xunta lamentó además que entre los inconvenientes de la huelga está la no tramitación de actas de defunción y de nacimiento, un aspecto que para él merece la consideración de servicio fundamental. De la misma forma que desatender las urgencias hospitalarias durante una huelga rayaría en conducta penal, considera que hay acciones que deberían estar garantizadas como servicios mínimos, en el caso de la Justicia, como que "los fallecidos descansen también desde el punto de vista administrativo".
Subvenciones agrarias
El Consello de la Xunta conoció en su reunión de ayer el informe sobre el alcance de la tercera convocatoria de ayudas europeas para la transformación y comercialización de productos agrarios. En total se presentaron 121 solicitudes con proyectos de inversión por importe de 173 millones de euros, lo que supone un 88% más que en el año 2016 y un 36% más que en 2017. Del total, 64 millones corresponden al sector lácteo; 65 a cerveza, aceite y miel; 27 al cárnico y los 29 millones restantes, a frutas y hortalizas. "Fue un éxito", destacó el presidente gallego.
