Si con el anterior baremo la experiencia profesional para optar a la apertura de una farmacia en Galicia valía un máximo de 30 puntos, ahora, con el nuevo decreto, aumenta hasta los 60 puntos. Este cambio implica que el currículo del futuro propietario de una botica en la comunidad gallega pesará el doble que hasta ahora.

La nueva normativa, publicada ayer en el Portal de Transparencia e Bo Goberno da Xunta y que modifica el anterior decreto (146/2001), incrementa así la puntuación correspondiente al ejercicio relacionado con la dispensación de medicamentos en oficinas de farmacia, "dado que se trata de garantizar que este labor pueda realizarse por las nuevas personas adjudicatarias con mayor eficacia y eficiencia, a efectos de prestar un servicio de calidad". En este caso se valorará a razón de "0,4 puntos por mes de servicios prestados, cuando en el anterior baremo se valoraba en 0,04 puntos", según informa la Consellería de Sanidade. El Portal de Transparencia de la Xunta publica los dos anexos que recogen los méritos para la adjudicación y los criterios que deberán observar los integrantes de la comisión de valoración.

La valoración del ejercicio farmacéutico en atención primaria, farmacia hospitalaria y como director/a farmacéutico/a "experimenta una pequeña variación aunque manteniendo el peso que ya tenía en el baremo anterior (pasando de 0,01 a 0,15 puntos por mes de servicios prestados)".

Además, se recoge expresamente la valoración del ejercicio como farmacéutico/a responsable de servicios farmacéuticos de centros de atención a drogodependientes. "Finalmente, la valoración de la docencia se incluye ahora en este apartado, pasando a valorarse con 0,4 puntos por curso académico (baja 0,1 respecto del anterior)", expresa Sanidade a través de un comunicado.

En relación a los méritos académicos, la puntuación máxima obtenida en base a este criterio pasa de los 12 a los 15 puntos, "incrementándose ligeramente los puntos obtenidos por cada una de las cualificaciones, además de reconocer ahora y puntuar la obtención de premio extraordinario". "Por el contrario, no se valoran las materias de idiomas (excepto la de conocimiento de la lengua gallega, por tratarse de un mérito valorable por imperativo de la ley), religión, formación política y educación física, materias sobre las que el anterior baremo guardaba silencio", apunta el departamento de la Xunta.

Otra de las novedades de la nueva normativa es que el conocimiento del idioma gallego tendrá una puntuación máxima de 5 puntos, frente a los 10 anteriores. Pesará la mitad. Sobre formación continuada se mantiene la puntuación máxima posible en este apartado (10 puntos) así como el periodo valorable (últimos 10 años). La puntuación máxima que se puede conseguir por publicaciones baja de los 10 a los 4 puntos, aunque se siguen valorando las publicaciones efectuadas en el mismo periodo (última década).