El trabajo conjunto de la multinacional BorgWarner Emissions Systems Spain, con sede en Vigo, y el Grupo de Tecnología Energética (GTE) de la universidad de la ciudad olívica, les ha llevado a ser un ejemplo en transferencia tecnológica. De la colaboración con el equipo de investigación de la institución académica surgió una herramienta innovadora para el diseño y validación de los sistemas anticontaminación en motores de combustión interna de vehículos, que la multinacional implantará en todas las fábricas que tiene en el mundo.

Concepción Paz, del Grupo de Tecnología Energética de UVigo, y Sonia Civeira, responsable de I+D de BorgWarner, recibieron ayer en Santiago el premio al mejor caso de éxito de transferencia de tecnología Galicia 2017 en la categoría de grandes empresas, en un acto con el presidente de la Real Academia Galega de Ciencias (RAGC), Miguel Ángel Ríos, y el conselleiro de Economía, Francisco Conde, entre otras personalidades. El premio para la empresa tiene carácter honorífico: es el grupo de investigación de la universidad viguesa el que percibirá "6.000 euros netos por su esfuerzo en el campo de la transferencia de tecnología".

La relación entre la Universidad de Vigo y BorgWarner ha sido estrecha en los últimos años, durante más de una década. A través de esta colaboración consiguen "crear soluciones más avanzadas y eficientes para lograr reducir las emisiones contaminantes de vehículos", como expresó la responsable de I+D de BorgWarner. Concepción Paz, del grupo GTE, destacó que la estrecha colaboración entre la universidad y la empresa supone para esta última el desarrollo de conocimientos e innovaciones que le aportan una ventaja competitiva. Para los investigadores significa conocer de primera mano las necesidades de la industria "lo que tiene impacto directo en la labor docente porque permite orientarlo a la formación de profesionales adecuados al perfil demandado por el mercado laboral". La multinacional estadounidense tiene en Zamáns su centro mundial de I+D en sistemas de emisión.

En grupos de investigación, el premio fue para el Departamento de Ingeniería Agroforestal de la USC, en el Campus Terra de Lugo, en colaboración con el ingeniero de industrias alimentarias Hiram Varela. El reto de este proyecto es la puesta en valor de la sangre procedente de los mataderos a través de su transformación en harina de alta calidad. En el apartado de pymes, el premio al mejor caso de éxito empresarial de transferencia tecnológica fue para HGBeyohnd Materials Science, spin-off nacida en la Universidad de Santiago de Compostela en 2015 con el nombre de Lentimed. En colaboración con el Grupo de I+D Farma de la USC, esta empresa desarrolló hidrogeles para la liberación de sustancias activas en el organismo. Su primer producto es una lente de contacto capaz de liberar fármacos en la superficie ocular.