La Xunta habilitará en próximos días ayudas de hasta 100.000 euros para cubrir el 100% del coste de las obras de viviendas afectadas por la ola de incendios en Galicia. Estas ayudas serán complementarias de las posibles compensaciones económicas que paguen las compañías aseguradoras.

Cubrirán las obras de reparación de las casas afectadas por las lmas aunque estas se hayan iniciado antes de la apertura del plazo para solicitar las subvenciones. En el caso de las viviendas protegidas, el límite máximo del importe de la ayuda será del 75% del valor establecido en el municipio correspondiente.

Para la reparación de viviendas ocasionales habrá ayudas de hasta 40.000 euros, mientras que las construcciones anexas y menaje doméstico recibirán unos 3.000 euros en ambos casos.

Asimismo, el Gobierno gallego abonará hasta 450 euros de renta para pagar el alquiler de la vivienda en la que se realojen tanto propietarios como inquilinos de hogares quemados. Esta línea de alquiler será durante dos años a consecuencia del abandono de la vivienda habitual por los fuegos. También habrá una ayuda extraordinaria de 600 euros para formalizar la fianza y las altas de los suministros.

Árboles pirófilos, lejos de las casas

La Xunta amplía de 30 a 50 metros la distancia de árboles de fácil combustión (pirófilas) de zonas de riesgo, como aquellas con poca altitud o pendiente superior al 10%, así como las caras norte de las provincias de Pontevedra y A Coruña, en donde el viento del nordeste sopla con mayor peligrosidad hacia zonas habitadas.

Esta es una de las medidas que incluye la Xunta en la ley de acompañamiento a los presupuestos para 2018, entre la batería de cambios normativos que incluye para mejorar la prevención contra incendios. La ampliación a 50 metros de las árboles pirófilas también es extensible a gasolineras, cámpings e instalaciones industriales con material inflamable.

Además, se prohíbe por completo la plantación de acacias a menos de 50 metros de edificios. También se obliga a que en estas franjas de gestión de biomasa los eucaliptos y pinos guarden una distancia mínima de 10 metros entre cada ejemplar. Asimismo, en el entorno de las subestaciones eléctricas y estaciones de telecomunicaciones se obliga a la retirada de especies pirófilas a menos de cinco metros de distancia.