El Rey Felipe VI telefoneó ayer tarde al alcalde de Vigo, Abel Caballero, para interesarse por la evolución de la oleada de incendios que asoló el municipio. El Monarca trasladó al regidor su apoyo y solidaridad a toda la ciudad, así como le encomendó que transmitiera un abrazo a la ciudadanía viguesa. Por su parte, Caballero informó a Felipe VI sobre la situación vivida en el centro urbano y en las parroquias y le confirmó que todo estaba ya bajo control y con los fuegos extinguidos.