"Es su oportunidad". Un histórico socialista aseguraba hace meses que Gonzalo Caballero (1975, Ponteareas) se presentaría a las primarias para liderar el PSdeG y que tendría opciones ante la rebelión de las bases que había aupado de nuevo a Pedro Sánchez como un voto también de castigo al aparato, al que se culpa del declive del puño y la rosa a nivel estatal y gallego.

Socialista de cuna, Caballero es economista y profesor de Economía Aplicada en la Universidade de Vigo y sobrino del alcalde vigués, Abel Caballero, del que se distanció hace años tras chocar, por ejemplo, en las primarias de 1998 en que apoyó a Josep Borrell mientras su tío prefería a Rafael Almunia. Con Ventura Pérez Mariño, el líder electo del PSdeG fue edil en Vigo dos años.

Su papel interno ha sido el de azote de las direcciones del partido, siendo el máximo exponente el congreso autonómico de 2009 en que los barones pactaron el relevo de Emilio Pérez Touriño, papel reservado a Pachi Vázquez. En los pasillos del edificio pontevedrés en que tuvo lugar la cita, el nuevo líder del partido buscaba eco en los medios después de que le impidiesen competir con el exconselleiro de Medio Ambiente. De ser un "outsider" al que algunos cargos medios miraban con desdén y que el año pasado no logró avales para aspirar a ser candidato, ha pasado a la cúspide del partido con una campaña interna intensa, pateando las agrupaciones, mostrando un mensaje duro con el "aparato "y prometiendo un nuevo tiempo.

Algunas voces le afean haber sido más crítico durante años con su tío en Vigo o con la dirección gallega que con el PP. Ahora debe capitanear la revolución interna prometida para el PSdeG.