Las primarias para elegir secretario xeral del PSdeG serán cosa de dos. Más de diez mil militantes socialistas están llamados a votar el próximo domigo para elegir secretario xeral. Deben decidir entre dar la responsablidad de reflotar un partido que es tercera fuerza en el hemiciclo gallego al profesor de la Universidad de Vigo Gonzalo Caballero o al diputado coruñés Jun Díaz Villoslada. Aunque la carrera por hacerse con el liderazgo del PSdeG, un partido que lleva más de año y medio con una dirección interina, tras la dimisión de José Ramón Gómez Besteiro por sus imputaciones judiciales, arrancó con tres aspirantes, ayer Caballero y Xoaquín Fernández Leiceaga pactaron una sola lista, que estará encabezada por el primero. Leiceaga mantedría la portavocía parlamentaria, si Caballero, que no tiene escaño en O Hórreo, gana. Pretenden sumar fuerzas para ganar y "poner fin las tutelas y las baronías y dar paso a la militancia de base". Para ellos, su rival, Juan Díaz Villoslada, es el candidato del aparato del PSdeG y del PSOE y quien mueve los hilos en la sombra es Besteiro.

Caballero y el portavoz parlamentario presentarán hoy a primera hora de la mañana en Santiago los detalles de su candidatura "conjunta", en la que el segundo renuncia a la secretaría general, por tener menos avales que el primero, pero espera ser "compensado por esta renuncia". "Habrá un reparto equilibrado de responsabilidades", explicaban ayer desde su entorno. La dirección será "compartida y equilibrada y abrirá paso a la renovación" , remarcaban las mismas fuentes.

Ambos pretenden formar un tándem ganador que les aúpe a la dirección del socialismo gallego. Parten de la base de que los dos fueron los candidatos con más avales y Villoslada fue el tercero que tuvo más firmas. Caballero sumó 2.297 avales, Leiceaga 1.803 y Villoslada, 1.790 avales.

Desde el entorno del diputado nacido en Ourense, pero afincado en A Coruña, advierten de que no valen las sumas que hacen sus rivales, pues dan por seguro que militantes que iban a apoyar al portavoz parlamentario se negarán a votar a Gonzalo Caballero. También sostienen que los avales de Leiceaga estaban "inflados y duplicados". La dirección autonómica dio por buenos 1.803 avales del portavoz parlamentario.

En todo caso, desde la lista del profesor de la Universidad de Vigo consideran que la integración de Leiceaga refuerza la ventaja con que ya partía al ser el candidato con más avales.

La alianza de Caballero y Leiceaga se explica desde ambas candidaturas como una respuesta a "los movimientos de aproximación entre el tercer candidato y la agrupación del PSOE de Vigo". Villoslada, según las mismas fuentes, ya "cuenta con el favor del aparato del partido a través de Pilar Cancela y puede sumar el poder de Vigo y la infuencia de la Diputación de Pontevedra".

El alcalde de Vigo, Abel Caballero, avanzó que no promovería un candidato a la dirección de los socialistas gallegos y se decantó por la neutralidad. En el recuento de avales, según fuentes socialistas, su neutralidad fue cierta. Desde el PSOE de Vigo guardan silencio frente a las críticas lanzadas desde los equipos de Gonzalo Caballero y Leiceaga de que en los últimos días habría firmado una alianza con Villolsada y que en la votación en urna pediría a los suyos, aunque no publicamente y sí discretamente, votar por él. Sería una manera de acercarse a Pedro Sánchez, tras apostar por Susana Díaz en las primarias del PSOE, apuntan sus críticos.

Resultado incierto

El pacto de Gonzalo Caballero y Villoslada cambia el escenario, reconocen fuentes socialistas. Caballero eleva sus probabilidades de ganar el domingo, pero Villoslada aún tiene opciones, sobre todo si a su favor se inclina el PSOE de Pontevedra. "El resultado es incierto, Caballero parte como favorito, su alianza con Leiceaga es una buenba jugada, pero la decisión de la militancia es una incógnita. Todo puede pasar. No me atrevo a apostar. En las primarias a la secretaría general del PSOE, ganó Pedro Sánchez y no tenía más avales que Susana Díaz",comentaba ayer un dirigente socialista.

Otro cargo institucional del PSOE gallego apuntaba: "Todo puede pasar el domingo, pero pase lo que pase el domingo, el partido continuará fracturado, dividido a la mitad. Como mucho uno de los dos ganará con el 60% de los votos, y ese 60% ya me parece mucho".