Galicia es la cuarta autonomía que paga con más agilidad a sus proveedores y un mes más abona las facturas antes de comience el periodo medio de pago. La comunidad no necesitó en junio los 30 días de plazo que otorga la ley para hacer frente a los pagos con sus proveedores y se adelantó 0,72 días de media a la fecha en que empiezan a contar, ya que la Xunta dispone de 30 jornadas para recibir la factura y otras 30 para pagarlas, según el Ministerio de Hacienda. Este plazo cumple con el objetivo del plan Pago 10, con el que el Gobierno autonómico pretende situar el período medio de pago en diez días. Por delante de Galicia están el País Vasco, Andalucía y Navarra.
Pero no todos los concellos gallegos siguen la misma tendencia que la media autonómica. Casi una treintena -en concreto 28- superan los 90 días en los pagos, el triple del plazo máximo. Los casos más destacados son los municipios que necesitan más de un año. A Bola (Ourense) es el concello que más tarda en abonar las facturas que acumula: 518 jornadas, casi año y medio. Cerca se sitúan Laxe y Coristanco, en A Coruña, con un periodo medio de 491 y 474 días respectivamente. Por encima de las 90 jornadas también pagan otras seis entidades locales de A Coruña, tres de Lugo, dos en Pontevedra y 13 en Ourense.
